Volkswagen acepta dialogar, pero no garantiza el futuro de Seat
La crisis de Seat encontró ayer el camino del diálogo. La cúpula de la multinacional alemana Volkswagen dio explicaciones a los secretarios de las secciones sindicales de CC OO y UGT, en una reunión celebrada en la sede central del grupo en Wolfsburg. Los sin dicalistas españoles salieron muy satisfechos del encuentro y afirmaron que habían recibido garantías sobre los tres principales objetivos que persiguen: la continuidad de la marca Seat, la continuidad de los centros y el acuerdo de buscar conjuntamente solución a los problemas de plantilla.Este optimismo contrastó con la nota oficial hec...
Regístrate gratis para seguir leyendo
Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
La crisis de Seat encontró ayer el camino del diálogo. La cúpula de la multinacional alemana Volkswagen dio explicaciones a los secretarios de las secciones sindicales de CC OO y UGT, en una reunión celebrada en la sede central del grupo en Wolfsburg. Los sin dicalistas españoles salieron muy satisfechos del encuentro y afirmaron que habían recibido garantías sobre los tres principales objetivos que persiguen: la continuidad de la marca Seat, la continuidad de los centros y el acuerdo de buscar conjuntamente solución a los problemas de plantilla.Este optimismo contrastó con la nota oficial hecha pública por Volkswagen, en la que apuesta por una solución negociada, pero no garantiza el mantenimiento de su centro de la Zona Franca.
El Gobierno intervino ayer en la crisis. El ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, criticó veladamente la gestión realizada por Volkswagen al recordar que "en su día el Gobierno hizo un esfuerzo de financiación importante cuando la empresa estaba hundida y se vendió de una manera ciertamente equilibrada", en referencia a las cuantiosas inversiones destinadas a traspasar Seat a Volkswagen tras el abandono de Fiat.
Página 37