Aznar recuerda palabras de González en 1989: "Si no funciona la economía, lo demás son cuentos"

Toledo José María Aznar, que ha hecho de la crisis, las devaluaciones de la peseta y el aumento del paro su gran argumento electoral, se agarró ayer a una cita de Felipe González para justificar el tono que intenta imprimir a su campa fia. Según las palabras del jefe del Gobierno cuando era candidato a lareelección en 1989, si no funciona la economía, "lo demás son cuentos". El líder del PP intervino ante 6.000 personas que casi llenaban la plaza de toros de Toledo. Mientras Javier Arenas se refería a Franco para decir que ya estaba bien de utilizarlo como justificación del fracaso socialista,...

Toledo José María Aznar, que ha hecho de la crisis, las devaluaciones de la peseta y el aumento del paro su gran argumento electoral, se agarró ayer a una cita de Felipe González para justificar el tono que intenta imprimir a su campa fia. Según las palabras del jefe del Gobierno cuando era candidato a lareelección en 1989, si no funciona la economía, "lo demás son cuentos". El líder del PP intervino ante 6.000 personas que casi llenaban la plaza de toros de Toledo. Mientras Javier Arenas se refería a Franco para decir que ya estaba bien de utilizarlo como justificación del fracaso socialista, se escucharon entre el público vivas aislados al dictador.

Aznar se limitó a repetir, en general, los argumentos que viene desgranando desde el comienzo de la precampaña. No obstante, leyó unas palabras textuales pronunciadas en 1989 por Felipe González cuando explicaba por qué decidió adelantar las elecciones generales. González reclamaba entonces el voto para propiciar un crecimiento económico, ya que, según explicaba, "cuando el instrumento económico no funciona, lo demás son cuentos, cuentos y cuentos".

"Ahora somos nosotros los que vamos a echarles las cuenta?, concluyó Aznar antes de decir que España sufre la crisis más amplia y profunda de los. países de la CE.

La recuperación debe producirse, según el líder del PP, de la mano de una España más fuerte, más competitiva, con empresas que puedan vender más fuera. "Cuando recuperemos la moral nacional, cuando volvamos al esfuerzo y al trabajo como el que hacéis vosotros", dijo, "en lugar de aguantar a tanto señorito y a tanto chulo que se ha enriquecido a costa del traba o ajeno y de forma ilícita, en ese momento estaremos recuperando España".

Luego hizo un canto a la España bien vertebrada y cohesionada, como la querían los regeneracionistas, cuyas ideas, según dijo, hacen suyas los populares. "Quiero una España unida y sin privilegios para nadie" añadió, "quiero un compromiso de igualdad y de respeto a la diversidad de sus regiones".

El público en todo momento se mostró participativo, con gritos e interrupciones reiteradas. Uno de los momentos de participación, aunque mucho más reducida, no estaba previsto en el guión. Javier Arenas, coordinador del comité de campaña electoral del partido, acusaba a los socialistas de hablar de la guerra civil para ocultar su nerviosismo. "Hace tiempo que sabemos que Franco no puede servir de coartada a los errores del partido socialista". La imprudente mención al dictador fue cazada al vuelo por algunos. Al menos dos voces masculinas chillaron "¡Viva Franco!", mientras una mujer se lamentaba desde las sillas colocadas en el ruedo: "El pobrecito ya no puede estar vivo".