Del AVE al gusano

Es cierto: el AVE tiene un morro electoral que se lo pisa. Comprendo que el ministro Borrell lo defendiera acaloradamente en los debates por televisión contra los ataques despiadados de Álvarez Cascos, quien, según parece, no denuncia el Tren de Alta Velocidad sino las supuestas comisiones ilegales que mediaron en su construcción. Aquel debate me abrumó. Fue plúmbeo, malsonante y violento. También me asustó que Borrell, irritado por las descalificaciones de Álvarez Cascos, llegara a increparle: "¿Sabe lo que le digo? ¡que estoy convencido de que si un día descarrila el AVE, ustedes, los del PP...

Es cierto: el AVE tiene un morro electoral que se lo pisa. Comprendo que el ministro Borrell lo defendiera acaloradamente en los debates por televisión contra los ataques despiadados de Álvarez Cascos, quien, según parece, no denuncia el Tren de Alta Velocidad sino las supuestas comisiones ilegales que mediaron en su construcción. Aquel debate me abrumó. Fue plúmbeo, malsonante y violento. También me asustó que Borrell, irritado por las descalificaciones de Álvarez Cascos, llegara a increparle: "¿Sabe lo que le digo? ¡que estoy convencido de que si un día descarrila el AVE, ustedes, los del PP, declararían ese día fiesta nacional!".¡Piedad! ¡Por favor, sean ustedes respetuosos con el usuario y no animen al maquinista a cometer un desafuero ni antes ni después del 6 de junio!

Encuanto he vislumbrado a las avemozas repartiendo cava y auriculares para ver y oír a Woody Allen gesticulando en la pantalla, he olvidado a los políticos. A las 14.30 pasaron el carrito con sudarios en forma de periódicos. No, gracias. Minutos después sirvieron pastel de salmón y recio solomillo de guardaagujas en clase Club, donde mandíbulas y relojes se mueven más despacio que el paisaje. Así, he escuchado a mi vecino de asiento: "El AVE me ha puesto en casa", dice el radiólogo Antonio Luna, presidente del Colegio de Médicos de Jaén, "porque verá, esta mañana he salido a las 7.15 de Jaén en mi coche para ir a Córdoba, donde he tomado el AVE, que me llevó a Madrid a las 10.20. Allí tuve una reunión en el Ministerio de Sanidad y a las 14.00 horas he vuelto otra vez al AVE y ahora llegaré a Córdoba a las 15.40 y allí cogeré mi coche, y a las cinco en punto estaré en Jaén para pasar consulta hasta las nueve".

La estación de baja velocidad española se encuentra en la Plaza de Armas, junto a los esqueletos de la Expo. Es una estación de autobuses donde no hay maletas de marca sino bolsas de plástico y mochilas. El gusano-bus a Castilblanco de los Arroyos necesita una hora para cubrir una distancia de 35 kilómetros. Aquí dentro huele a día muy largo. A mi lado, un chaval de 22 años lleva un ejemplar de La Guía del Empleo. "Guarda, limpiacristales, socorrista o chófer. Me da igual. Pero no sale nada", dice. Me enseña anuncios: se ofrece ventrílocua que trabajó en Tele 5, licenciados en Derecho, diplomados en Empresariales, químicos y delineantes, "si ésos no tienen empleo ¿qué voy a esperar yo?". Luego, el gusano de los obreros para en Alcalá del Río. A las puertas de la sede del PSOE hay un tipo que está quieto. ¿Será de verdad o se trata del monumento al parado desconocido? Al gusano le esperan en Castilblanco de los Arroyos una cigüeña en la torre de la iglesia del Divino Salvador, seis mujeres que rezan el rosario y Juan (policía local desde hace tres años pero todavía fuera de nómina), quien dice que Izquierda Unida gobierna aquí, y muy bien, desde hace 16 años.