GENTE

Leopoldo Sánchez Agudo,

médico jefe del servicio de neumología del Instituto de Salud Carlos III de Madrid, seña laba días pasados, en los cursos de verano que la Universidad Complutense organiza en El Escorial, que, según un estudio realizado por su departamento, el número de fumadores en España podría reducirse en 400.000 cada año si el médico de cabecera les aconsejara que abandonasen su adicción. El deseo de abandonar el consumo de tabaco es primordial para conseguir eliminar las recaídas, indicaba Sánchez Agudo. Uno de los métodos más utilizados para dejar de fumar suele ser el mascar chicle o comer zanahorias c...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

médico jefe del servicio de neumología del Instituto de Salud Carlos III de Madrid, seña laba días pasados, en los cursos de verano que la Universidad Complutense organiza en El Escorial, que, según un estudio realizado por su departamento, el número de fumadores en España podría reducirse en 400.000 cada año si el médico de cabecera les aconsejara que abandonasen su adicción. El deseo de abandonar el consumo de tabaco es primordial para conseguir eliminar las recaídas, indicaba Sánchez Agudo. Uno de los métodos más utilizados para dejar de fumar suele ser el mascar chicle o comer zanahorias crudas. Sin embargo, este último método puede crear tanta adicción como fumar cigarrillos y hasta presenta mayores dificultades cuando se intenta dejar el hábito, asegura la revista británica British Journal of Adictions, que publica en su último número una investigación científica sobre esta afición popularizada por el famoso Bugs Bunny de los dibujos animados. Los psiquiatras checoslovacos que han realizado el estudio explican que convertirse en constante comedor de zanahorias crudas puede ser muy bueno para la piel, pero produce serios trastornos nerviosos. Los científicos centroeuropeos no han descubierto exactamente la causa de la adicción, aunque apuntan al caroteno como principal motivo. Finalmente, la investigación, que analiza los distintos grados de adicción, constata que en algunos casos los afectados han tenido que volver a fumar para dejar su afición a las zanahorias.

Archivado En