El beneficio del Grupo Torras en 1991 fue un 30% inferior a lo anunciado

, El beneficio consolidado del Grupo Torras durante 1991 fue de 2.997 millones de pesetas, según la información facilitada por la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Esta cifra es un 30% inferior a los beneficios de 4.240 millones anunciados por el propio Grupo Torras en el pasado mes de abril.

Estos nuevos datos significan que se mantiene la tendencia descendente de los resultados del buque insignia de KIO en España durante los últimos años. Manejando los últimos datos citados, la diferencia entre 1991 y 1990 -año en el que los resultados fueron de 3.963 millo...

, El beneficio consolidado del Grupo Torras durante 1991 fue de 2.997 millones de pesetas, según la información facilitada por la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Esta cifra es un 30% inferior a los beneficios de 4.240 millones anunciados por el propio Grupo Torras en el pasado mes de abril.

Estos nuevos datos significan que se mantiene la tendencia descendente de los resultados del buque insignia de KIO en España durante los últimos años. Manejando los últimos datos citados, la diferencia entre 1991 y 1990 -año en el que los resultados fueron de 3.963 millones- refleja una caída del beneficio del 25%, y no una recuperación del 7% como en principio se había anunciado. Asimismo, los resultados ya cayeron en 1990 el 47% respecto a 1989, cuando obtuvo unos beneficios de 7.477 millones.

En la cuenta de resultados elaborada por Torras llama poderosamente la atención el volumen de gastos financieros que soporta el grupo, superior a 30.000 millones de pesetas y tan sólo 2.000 millones por debajo de lo que representaban en 1990. Esto es especialmente significativo si se tiene en cuenta que durante el ejercicio de 1991, el accionista mayoritario del Grupo Torras, es decir KIO, convirtió en capital más de 160.000 millones de pesetas, que había inyectado en las cuentas del grupo como crédito subordinado. Los portavoces de Torras afirman que toda esta nueva inversión se destinó a la cancelación de créditos con entidades financieras, lo cual debería haber reducido consecuentemente el peso de los intereses en la cuenta de resultados.