Macedonia está en Grecia

Lectores habituales del diario de su digna dirección, nos dirigimos a ustedes con el ruego de que den publicidad a esta carta, en la que manifestamos nuestra preocupación por los acontecimientos que están teniendo lugar en los territorios de la antigua Yugoslavia y que, entre otras y más graves consecuencias, han vuelto a poner de actualidad una vieja cuestión que, si bien fue artificialmente suscitada dentro de la confederación por razones de política interna, puede llevar la desestabilización a otras zonas hasta ahora afortunadamente fuera de conflicto. Nos referimos a la pretensión de utili...

Lectores habituales del diario de su digna dirección, nos dirigimos a ustedes con el ruego de que den publicidad a esta carta, en la que manifestamos nuestra preocupación por los acontecimientos que están teniendo lugar en los territorios de la antigua Yugoslavia y que, entre otras y más graves consecuencias, han vuelto a poner de actualidad una vieja cuestión que, si bien fue artificialmente suscitada dentro de la confederación por razones de política interna, puede llevar la desestabilización a otras zonas hasta ahora afortunadamente fuera de conflicto. Nos referimos a la pretensión de utilizar, para una de las nuevas repúblicas emergentes, el nombre de Macedonia, nombre que por tradición, historia y cultura corresponde a la región griega cuya capital es Salónica.Los vínculos de cultura, amistad y afinidad que nos unen al pueblo griego nos mueven a apoyar decidida y claramente sus justas aspiraciones a la plena soberanía sobre su actual territorio y considerar, en consecuencia, que Macedonia sólo puede ser el nombre tradicional de una provincia que pertenece a Grecia.

Aun respetando la opción que tienen otros pueblos a expresar su derecho a la autodeterminación y, por tanto, tam-

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bién el derecho, del pueblo eslavo que vive en torno a Escopia, no consideramos admisible la utilización por parte de este pueblo de un nombre y de un gentilicio, Macedonia y macedonio, que, en nuestra opinión, solamente responde a un intento reciente y desafortunado de encontrar una denominación que lo individualice frente a sus vecinos eslavos.

En consecuencia, hacemos un llamamiento a los responsables del Gobierno a que defiendan en los foros internacionales, y en nombre de la amistad y las buenas relaciones existentes entre los países de España y Grecia, que el reconocimiento del nuevo Estado eslavo configurado en torno de Escopia no implique la aceptación del término Macedonia ni del gentilicio macedonio para ninguna realidad distinta a la de las tierras griegas de la zona de Salónica y todos sus habitantes.- catedrático de la Universidad de Valencia, y 11 firmas más.