La subida de Tokio anima a las bolsas europeas

El buen cierre de Tokio y la apertura al alza de Nueva York animaron la mayoría de los mercados continentales, incluido el español, que cerraron con ganancias en sus índices generales.El índice Nikkei subió 416,5 puntos y marcó la pauta en la apertura de las bolsas europeas y americanas. Londres fue mejorando posiciones y su indicador Footsie cerró con una ganancia de 13,40 enteros. La Bolsa de París, en cambio, que había cerrado por fiesta el jueves perdió 5,35 puntos en el indicador CAC.

El impulso inicial de Nueva York no se mantuvo y cayó levemente al final de la sesión por la toma ...

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El buen cierre de Tokio y la apertura al alza de Nueva York animaron la mayoría de los mercados continentales, incluido el español, que cerraron con ganancias en sus índices generales.El índice Nikkei subió 416,5 puntos y marcó la pauta en la apertura de las bolsas europeas y americanas. Londres fue mejorando posiciones y su indicador Footsie cerró con una ganancia de 13,40 enteros. La Bolsa de París, en cambio, que había cerrado por fiesta el jueves perdió 5,35 puntos en el indicador CAC.

El impulso inicial de Nueva York no se mantuvo y cayó levemente al final de la sesión por la toma de beneficios. El índice Dow Jones cayó 1,55 puntos y cerró en 3.396,88. Pese a esta caída de última hora, el mercado neoyorquino llegó a subir 18 puntos a principios de la jornada, dando un fuerte impulso antes del cierre a las bolsas europeas. Los bolsistas norteamericanos siguen esperando el dato del empleo que se dará a conocer el próximo 5 de junio.

Los analistas creen, sin embargo, que la distinta situación económica de los diferentes países no permite predecir comportamientos unidireccionales en las principales bolsas del mundo. En Europa, la magnitud del ajuste a realizar por unos y otros para entrar en el la primera división de Maastricht no es el mismo y hay países con inflación baja que pueden permitirse crecer más que otros.

El prestigioso Instituto Kiel hizo ayer público un informe en el que la tasa de inflación de los principales países industrializados se reducirá desde el 4,25% en 1991 hasta el 3,5% a finales de 1991. La tasa de inflación se mantendrá en Alemania en la cota del 3,5%, según el Instituto Kiel, mientras que Japón la reducirá del 3,3% al 2,%.

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