Cuatro niñas y tres adultos fallecen al chocar frontalmente un autocar y un turismo en Daimiel

Cuatro niñas y tres adultos murieron ayer al chocar frontalmente un autocar y un turismo en el kilómetro 339 de la N-430, a la altura de la localidad de Daimiel, a 29 kilómetros de Ciudad Real. A última hora de ayer, ocho pequeños permanecían ingresados -uno de ellos en Madrid- a causa de las heridas. Dos se encontraban muy graves. La primera hipótesis del accidente apunta a un despiste del conductor del autocar, Francisco Javier Tierno, de 29 años, que sufrió heridas leves. Una de las niñas fallecidas viajaba a Daimiel para hacer su primera comunión. En total resultaron heridas 22 personas....

Cuatro niñas y tres adultos murieron ayer al chocar frontalmente un autocar y un turismo en el kilómetro 339 de la N-430, a la altura de la localidad de Daimiel, a 29 kilómetros de Ciudad Real. A última hora de ayer, ocho pequeños permanecían ingresados -uno de ellos en Madrid- a causa de las heridas. Dos se encontraban muy graves. La primera hipótesis del accidente apunta a un despiste del conductor del autocar, Francisco Javier Tierno, de 29 años, que sufrió heridas leves. Una de las niñas fallecidas viajaba a Daimiel para hacer su primera comunión. En total resultaron heridas 22 personas.

La colisión se produjo a las 9.45, cuando, según la versión facilitada por la Guardia Civil, el autocar de la empresa Hermanos Mata, un Pegaso M-5913-ND, invadió la calzada contraria, por la que circulaba un automóvil Renault 19 con matrícula M7429-KF. En el autocar viajaban 22 niños y adolescentes entre ocho y 16 años, hijos de empleados del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Cienmat, antigua Junta de Energía Nuclear), tres monitores y un matrimonio, padres de uno de los pequeños. El vehículo había salido a las 7.30 de la sede del Cienmat en Madrid. Los chicos iban a participar, en la localidad de Puertollano, en una competición deportiva con hijos de empleados de la empresa Repsol Química.

Según el parte oficial, el accidente fue -unacolisión frontal excéntrica". El choque se produjo al comienzo de una curva suave y con visibilidad. El R 19 ¡ba conducido por Jesús Fernández de Marcos Monroy, que resultó con fractura de esternón. Iba con su familia a Daimiel.

Primera comunión

Era un día de fiesta para ellos. Su hija mayor, Elena, de nueve años, iba a hacer la primera comunión esa misma mañana. Llevaban el traje de comunión en el coche. La pequeña, su madre, Elena Moya Rodríguez-32 años- y su hermana Erika -22 meses-, fallecieron en el acto.La familia, de Dalmiel, vivía en Fuenlabrada (Madrid).

"Chocaron y el autobús fue dando muchos vuelcos", explicó Antonio, un testigo que circulaba en su moto por las inmediaciones. El autocar se arrastró unos 50 metros tras recibir el impacto. Quedó atravesado sobre la calzada, parcialmente caído sobre una vaguada. El pretil cedió sin romperse y aprisionó a dos de las pasajeras, que tuvieron queser rescatadas con ayuda de una grúa. Eran Ainoa Pascual Fernández, de 14 años, y Mari Carmen Carrero, de 12, muertas en el acto. También fallecieron instantáneamente Antonio Cortés Fraile y Ana María Quiñones, padres del pequeño Roberto, que fue trasladado a Madrid en gravísimo estado.

A última hora de ayer permanecían ingresados en el hospital Nuestra Señora de Alarcos, en Ciudad Real, siete nifios heridos: Lorena Fernández Mayorales -muy grave, extirpado el bazo y roto el hígado-, Beatriz Pascual -traumatismo craneoencefálico y fractura de pelvis, pronóstico grave-, su hermana Esther -menos grave-, Marta y Beatriz Benito, Elena Cerrada y Guillermo Heras, -menos graves-

En este hospital atendieron también al conductor del autobús, Francisco Javier Tierno Castellé, que sufrió heridas leves y fue dado de alta. Se le administraron calmantes y permaneció silencioso. Dos de los cadáveres fueron trasladados a Madrid. El resto permanecían en los depósitos de Manzanares y Daimiel.