Disfunciones

La sesión de ayer trajo, al cierre de los corros y en las primeras operaciones del mercado continuo, una bajada de cotizaciones con volumen de negocio estabilizado. Y es que apenas quedan recursos válidos en este mercado para provocar un cambio de orientación. La decisión del Banco de España de mantener el precio de sus certificados de depósito no ha traído novedades. Una vez más el banco emisor y el Tesoro han actuado de forma distinta, aunque el inversor avezado conoce de sobra que esta disfunción se produce muy a menudo. Faltan noticias que empujen esta Bolsa arriba o abajo.Aunque faltan da...

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La sesión de ayer trajo, al cierre de los corros y en las primeras operaciones del mercado continuo, una bajada de cotizaciones con volumen de negocio estabilizado. Y es que apenas quedan recursos válidos en este mercado para provocar un cambio de orientación. La decisión del Banco de España de mantener el precio de sus certificados de depósito no ha traído novedades. Una vez más el banco emisor y el Tesoro han actuado de forma distinta, aunque el inversor avezado conoce de sobra que esta disfunción se produce muy a menudo. Faltan noticias que empujen esta Bolsa arriba o abajo.Aunque faltan datos para evaluar adecuadamente la orientación que puede tomar el mercado, en los últimos días se está generalizando la idea de un cambio de orientación en la situación económica. La economía financiera siempre ha sido sensible a este tipo de clímax, máxime si éste se crea en las prestigiosas instituciones que insisten estos días en un cierto agotamiento del modelo de política económica. Los resultados están ahí. No hay noticias económicas, pero sí opiniones de cualificados lobbies que expresan su inquietud sobre la actual situación económica. No cabe otra opción que seguir esperando acontecimientos.

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