'Ubi sunt?'

Los norteamericanos son pródigos en la acuñación de aforismos económico-filosóficos, de frecuente aplicación en medios bursátiles. Uno de los más conocidos es aquel que asevera easy comes, easy goes ("fácil viene, fácil se va"), que hace referencia de forma explícita al dinero, el líquido que llega, crece y en ocasiones (sea en un crack o en un crash) desaparece como de entre los dedos de un prestidigitador. Claro que no es el dinero lo único que llega fácilmente y se va con la misma facilidad; y como no hay nada nuevo bajo el sol, el aforismo no es más que una reedición d...

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Los norteamericanos son pródigos en la acuñación de aforismos económico-filosóficos, de frecuente aplicación en medios bursátiles. Uno de los más conocidos es aquel que asevera easy comes, easy goes ("fácil viene, fácil se va"), que hace referencia de forma explícita al dinero, el líquido que llega, crece y en ocasiones (sea en un crack o en un crash) desaparece como de entre los dedos de un prestidigitador. Claro que no es el dinero lo único que llega fácilmente y se va con la misma facilidad; y como no hay nada nuevo bajo el sol, el aforismo no es más que una reedición del viejo lugar común latino ubi sunt? (¿dónde están?), que se refiere a la inasible fugacidad de las cosas de la vida.El escaso negocio realizado ayer en la Bolsa de Barcelona podría ser fácil pasto del princicio del ubi sunt? Porque, ¿dónde estarán mañana los beneficios obtenidos ayer? Probablemente se los habrá tragado de nuevo la inestabilidad del mercado. Y es que la ligera recuperación que experimentó ayer la Bolsa barcelonesa, tras el descenso del lunes, no se convertirá, casi con total seguridad, en una tendencia continuada, y más teniendo en cuenta la tónica de descensos de Wall Street.

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