La niebla bloqueó Barajas mes y medio después de inaugurarse un dispositivo destinado a impedirlo

Un retraso medio de 5 minutos en la noche del martes, 55 en la mañana de ayer y cerca de cien vuelos cancelados en dos días han sido las consecuencias de la niebla que ha inundado desde el martes el aeropuerto de Barajas. A las seis de la tarde comenzaron los retrasos y desvíos a otros aeropuertos, como Málaga y Barcelona. Todo ello a mes y medio de inaugurarse un dispositivo destinado a facilitar la visibilidad en el caso de malas condiciones meteorológicas.

Los pasajeros se apelotonaban en las ventanillas de información para obtener, en la mayor parte de los casos, sólo una respuesta:...

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Un retraso medio de 5 minutos en la noche del martes, 55 en la mañana de ayer y cerca de cien vuelos cancelados en dos días han sido las consecuencias de la niebla que ha inundado desde el martes el aeropuerto de Barajas. A las seis de la tarde comenzaron los retrasos y desvíos a otros aeropuertos, como Málaga y Barcelona. Todo ello a mes y medio de inaugurarse un dispositivo destinado a facilitar la visibilidad en el caso de malas condiciones meteorológicas.

Los pasajeros se apelotonaban en las ventanillas de información para obtener, en la mayor parte de los casos, sólo una respuesta: la niebla.

Al mismo tiempo que aumentaba la indignación y el enfado de los viajeros, los autobuses contratados por las compañías aéreas ocupaban las terminales del aeropuerto para desplazarlos hacia sus destinos. A quienes rechazaron esta posibilidad, las empresas les ofrecieron un hotel y emprender hoy el viaje.

Otro responsable de Barajas indicó que la niebla llegó a dificultar la visibilidad por debajo de los 100 metros. "Aunque esta tarde [de ayer] hay una visibilidad de dos kilómetros, ha habido momentos en que ha bajado muchísimo y ha sido realmente imposible aterrizar".

La paralización parcial de la actividad se ha producido sólo mes y medio después de la inauguración del dispositivo antiniebla con el que la Administración pretendía reducir prácticamente a cero las cancelaciones a causa de este accidente meteorológico.

Aviones no homologados

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Fuentes de la Dirección General de Aviación Civil indicaron que el dispositivo funciona a la perfección y que el problema reside en que algunos aviones no cuentan con el sistema correspondiente ni con la cualificación necesaria por parte de la tripulación.

Añadieron que la decisión final siempre corresponde al piloto, que puede decidir no aterrizar y volver al aeropuerto de salida, como ocurrió el pasado martes con un vuelo de Iberia que partió de Sevilla a Barajas.

El pasado 31 de octubre en que se inauguró, la Dirección General de Aviación Civil indicó que Barajas se situaba desde ese momento entre los mejores aeropuertos del mundo. "Los beneficios", declaró un portavoz de este organismo, "serán también de orden económico, ya que, al evitar el traslado a otros aeropuertos, se evitarán también gastos extras de comida y residencias en hoteles".

Un portavoz de Iberia aseguró que la mayoría de sus aparatos, entre ellos los Airbus 320 y los 24 MD-87, están ya adaptados al dispositivo antiniebla, pero reconoció que otros aviones, cuyo número no precisó, no lo están.

El martes se cancelaron 47 vuelos. Aunque en un principio la niebla comenzó a despejar en la mañana del miércoles, a partir de las 20.30 de la tarde las condiciones meteorológicas empeoraron de nuevo, lo que obligó a cancelar y desviar nuevos vuelos. A medianoche, se habían cancelado unos 30 vuelos de salida, unos 20 de llegada y otros 10 se habían desviado. "Ahora hay unos 250 metros de visibilidad, y las salidas se realizan con cierta normalidad. A estas horas hay muchos menos vuelos programados, por lo que no hay esperas", indicaron fuentes del aeropuerto.

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