El 80% de las grandes empresas aplican salarios individuales a sus ejecutivos

El 80% de las 500 grandes empresas españolas emplean sistemas de retribución individualizados para pagar a sus ejecutivos, basados en, una paga extra anual fijada según el rendimiento de cada uno. El sistema se está extendiendo rápidamente a otras más pequeñas y también a los técnicos especialistas y hasta a los obreros.

Hasta hace unos cinco años apenas existía en España la retribución individualizada, entendida como filosofía de empresa, según Diego Galán, presidente en Cataluña de la Asociación Española de la Dirección de Personal (AEDIPE). Sí existían las llamadas bufandas -r...

El 80% de las 500 grandes empresas españolas emplean sistemas de retribución individualizados para pagar a sus ejecutivos, basados en, una paga extra anual fijada según el rendimiento de cada uno. El sistema se está extendiendo rápidamente a otras más pequeñas y también a los técnicos especialistas y hasta a los obreros.

Hasta hace unos cinco años apenas existía en España la retribución individualizada, entendida como filosofía de empresa, según Diego Galán, presidente en Cataluña de la Asociación Española de la Dirección de Personal (AEDIPE). Sí existían las llamadas bufandas -recompensas arbitrarias al rendimiento del trabajador-, pero no se entendían como un sistema de salarlo ni se incluían en nómina. Las multinacionales norteamericanas fueron las primeras en aplicar de forma sistemática la remuneración individual. Actualmente, unos 2.500 ejecutivos -pertenecientes a unas 400 empresas con más de 500 trabajadores- cobran salarios de esa forma, según Diego Galán.

En general, el salario individual se cobra una vez al año, como una especie de paga extra, de gran importancia en el conjunto de los ingresos anuales. Diego Galán estima que el salario fijo de uno de estos ejecutivos puede representar como media entre el 60% y el 65% de la retribución. El resto se percibe en forma de paga al rendimiento una vez al año, y no se puede consolidar al año siguiente.

La fijación del importe de la paga se lleva a cabo en función de tres variables. En primer lugar, el resultado general de la empresa. En segundo lugar, el funcionamiento durante el año del departamento donde trabaja el ejecutivo. Y, por último, una valoración individual o "apreciación del rendimiento" del ejecutivo. Esa apreciación se efectúa en el curso de una entrevista personal con su inmediato superior, en la que se evalúa hasta qué punto se han cumplido los objetivos fijados al principio del periodo respecto a formación y mejora en el trabajo.

El importe de esta paga supone una parte muy sustancial del salario del ejecutivo. Diego Galán afirma que "ello hace que sea consciente de que debe mantener su motivación y su productividad a un alto nivel. En cualquier caso, el salario fijo por si mismo ya suele ser en estos casos suficientemente elevado".

Controlar la movilidad

El sistema de retribución individual también ha permitido a las empresas limitar la movilidad de sus ejecutivos, que provoca escasa estabilidad en las empresas dada la competitividad en salarios. El ejecutivo tiene que esperar al menos un año para cobrar su paga de productividad. AEDIPE ha organizado recientemente en Barcelona unas jornadas sobre Relaciones laborales individualizadas. Una de las conclusiones del encuentro ha sido que hay una tendencia creciente a la aplicación de sistemas individuales de salario basados en el rendimiento entre los ejecutivos. Al mismo tiempo, en las jornadas se constató que cada vez más hay técnicos especialistas que reciben el mismo trato salarial.

En cuanto a la extensión de sistemas individuales entre los obreros, se encuentra en estado mucho más embrionario, segun Diego Galán, aunque empiezan a producirse experiencias en ese sentido. El proyecto más importante de individualización de retribuciones a los operarios es el que está preparando Seat para la nueva planta de producción de Martorell (Barcelona) que iniciará su producción a finales del próximo año. El sistema, que aún está pendiente de negociación con los sindicatos, afectaría a unos 7.000 trabajadores.