Heladero en Alaska

¡Toni vende helados en el polo!. Los colaboradores de Antonio Fernández Teixidó se rinden ante el entusiasmo con que el nuevo secretario general del CDS se aplica a cualquier tarea, aunque el empeño sea apuntalar un partido que amenaza ruina.Fernández Teixidó, asesor fiscal, ha sido el ganador de un congreso asambleario en el que le han ayudado sus viejos métodos de militante de la Liga Comunista. Este catalán exuberante, periquito declarado, devorador de toda la literatura sobre John Kennedy traducida al español, tendrá que lidiar ahora con la austeridad segoviana de Rafael Calvo Orteg...

¡Toni vende helados en el polo!. Los colaboradores de Antonio Fernández Teixidó se rinden ante el entusiasmo con que el nuevo secretario general del CDS se aplica a cualquier tarea, aunque el empeño sea apuntalar un partido que amenaza ruina.Fernández Teixidó, asesor fiscal, ha sido el ganador de un congreso asambleario en el que le han ayudado sus viejos métodos de militante de la Liga Comunista. Este catalán exuberante, periquito declarado, devorador de toda la literatura sobre John Kennedy traducida al español, tendrá que lidiar ahora con la austeridad segoviana de Rafael Calvo Ortega, su nuevo presidente.

A pesar de que fue precisamente su verbo desbordado el que le costó el puesto al proclamar que no era bueno reelegir a Caso como secretario general, siendo todavía portavoz del partido, Fernández Teixidó, Toni o Teixi para todos, no escarmienta. Estos días, además del atracón de reuniones para resucitar al partido, soporta con sonrisa socarrona las bromas de sus compañeros que le bombardean, en versión descafeinada de su acento catalán, con su lema precongresual: "Toni, florecieron las enmiendas".