Roger Leray, ex gran maestro del Gran Oriente de Francia

Roger Leray, gran maestro durante seis años de la principal obediencia masónica francesa, el Gran Oriente de Francia (GODF), falleció el miércoles, a la edad de 70 años.Leray, elegido al frente del GODF entre 1979 y 1981 y luego entre 1984 y 1987, había nacido en 1921 en el seno de una familia obrera y desarrolló una carrera profesional como técnico y director de fábricas tras participar en la guerra de Indochina a principios de los años cincuenta.

El ex gran maestro llegó a la masonería a través de la política, tras adherirse al Partido Radical por su admiración incondicional al varias...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Roger Leray, gran maestro durante seis años de la principal obediencia masónica francesa, el Gran Oriente de Francia (GODF), falleció el miércoles, a la edad de 70 años.Leray, elegido al frente del GODF entre 1979 y 1981 y luego entre 1984 y 1987, había nacido en 1921 en el seno de una familia obrera y desarrolló una carrera profesional como técnico y director de fábricas tras participar en la guerra de Indochina a principios de los años cincuenta.

El ex gran maestro llegó a la masonería a través de la política, tras adherirse al Partido Radical por su admiración incondicional al varias veces ministro Pierre Mendes-France, junto con quien abandonó dicho partido pocos años después.

"Ateo natural", como se calificaba él mismo, el ex gran maestro formaba parte del Comité Consultivo Nacional de Ética para las Ciencias de la Vida y de la Salud, y consideraba "peligrosamente reaccionarias" las propuestas lanzadas al respecto por el papa Juan Pablo II.

Leray era también miembro del Consejo Económico y Social (CES), organismo de estudios y de control de las actividades de la Conferencia sobre el Comercio y el Desarrollo de Naciones Unidas (CNUCED) y del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

Trabajó para el Gobierno socialista, partido en el que militó durante décadas, cuando en 1988 el entonces primer ministro Michel Rocard le nombró miembro de la misión encargada de apaciguar la situación en Nueva Caledonia.

Archivado En