Ewing rechaza renovar por 5,5 millones de dólares anuales para quedar libre

Patrick Ewing el pívot de los Knicks de Nueva York, ha rechazado una renovación de su contrato que le habría pagado más de 5,5 millones de dólares anualmente -más de 600 millones de pesetas- y ha recurrido a un juez árbitro con el propósito de anular los cuatro años restantes de su acuerdo y convertirse en un jugador libre. Un problema de cotización del jugador le enfrenta con su club y desestabiliza la omnipotente NBA.

Es un suceso inesperado que confirma una ruptura grave entre el jugador y el equipo, y que amenaza con revolucionar toda una Liga.La polémica se centra en una cláusula d...

Patrick Ewing el pívot de los Knicks de Nueva York, ha rechazado una renovación de su contrato que le habría pagado más de 5,5 millones de dólares anualmente -más de 600 millones de pesetas- y ha recurrido a un juez árbitro con el propósito de anular los cuatro años restantes de su acuerdo y convertirse en un jugador libre. Un problema de cotización del jugador le enfrenta con su club y desestabiliza la omnipotente NBA.

Es un suceso inesperado que confirma una ruptura grave entre el jugador y el equipo, y que amenaza con revolucionar toda una Liga.La polémica se centra en una cláusula del contrato de Ewing, firmado en 1985, por 32 millones de dólares -más de 3.500 millones de pesetas- en 10 años. Dicha cláusula especifica que el jugador tenía que ser uno de los cuatro mejores cotizados en la NBA el 1 de junio de 1991. Según los Knicks, Ewing es el cuarto jugador mejor pagado de la Liga. Su sueldo la próxima temporada será de unos 360 millones de pesetas, cantidad que sólo superarán John Williams, con unos 450; Akeem Olajuwon, con 400, y Michael Jordan, con 370.

Pero según David Falk, representante de Ewing, por lo menos dos jugadores más tendrán un sueldo mayor que él. Falk no quiso divulgar sus nombres, pero seguramente uno de ellos es Larry Bird, la estrella de los Boston Celtics, quien se prevé que cobrará 800 millones de pesetas. La polémica es si en esa cantidad están incluidos atrasos.

Ewing no quiere hacer caso de una oferta que le hicieron los Knicks en las últimas semanas para extenderle el contrato de cuatro a -seis años, con un total de 33 millones de dólares, 5,5 por año, lo que hubiera le hubiese convertido en el jugador mejor pagado en cualquier deporte de equipo. Aparentemente Falk y Ewing creen que alguien va a pagar más.