Empresarios valencianos ofertarán 6.000 millones a Escámez por el 18,5% del Banco de Valencia

Un grupo de empresarios valencianos ya cuenta con 6.000 millones de pesetas para hacer una oferta al presidente del Banco Central, Alfonso Escámez, por el principal paquete de su filial, el Banco de Valencia, un 18,5% del capital, según fuentes cercanas a los mismos. Entre los promotores están Juan Roig, propietario de Mercadona, la familia Lladró, José y Emilio Serratosa, presidente y consejero delegado de Valenciana de Cementos y José Ramón Cano, presidente de la sociedad de valores Cano y Piquer.

Por otra parte, y según informó la agencia Efe, el empresario José María Ruiz Mateos pre...

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Un grupo de empresarios valencianos ya cuenta con 6.000 millones de pesetas para hacer una oferta al presidente del Banco Central, Alfonso Escámez, por el principal paquete de su filial, el Banco de Valencia, un 18,5% del capital, según fuentes cercanas a los mismos. Entre los promotores están Juan Roig, propietario de Mercadona, la familia Lladró, José y Emilio Serratosa, presidente y consejero delegado de Valenciana de Cementos y José Ramón Cano, presidente de la sociedad de valores Cano y Piquer.

Por otra parte, y según informó la agencia Efe, el empresario José María Ruiz Mateos presentó ayer en la entidad filial del Central una "oferta formal y firme por ese mismo paquete accionarial a un precio de 1.680 pesetas por título". La cotización en Bolsa se sitúa en las 1.550 pesetas. El escrito de Ruiz Mateos dice que su oferta está avalada por "importantes entidades inversoras". El grupo de empresarios valencianos tomó esta decisión cuando vieron que el Banco Bilbao Vizcaya cerraba la venta del Banco de Crédito de Ahorro a la Caja de Ahorros de Madrid.Por su parte, fuentes del Banco Central han reconocido este interés de los empresarios valencianos aunque señalan que al banco no ha llegado ninguna oferta formal.

En todo caso, añaden que por ahora sería muy difícil que se vendiera el paquete de control del Banco de Valencia una vez que el Central ha dirigido su saneamiento y se halla en un buen momento para generar recursos.

Esas fuentes recalcan que ese paquete de control nunca se vendería a precio de mercado lo que supondría esos 6.000 millones aludidos, sino que valdría más. El principal paquete del Banco de Valencia lo ostenta el Central, después se sitúa el que posee el presidente de la entidad, Antonio Girona, con un 4,5% y el resto se halla muy diseminado entre pequeños accionistas.

Los promotores de esta oferta consideran que una vez que la fusión entre el Banco Central y el Banco Hispano Americano cristalice lo razonable es vender esta segunda marca. En la actualidad, la sede central en Valencia del banco que preside Escámez, la del Hispano y la del Banco de Valencia se hallan escasamente a 20 metros, lo que da una idea de la duplicidad que se producirá con la fusión.

Cano y Piquer realizó el pasado mes de mayo un estudio sobre la entidad filial del Central en la que se describen sus puntos fuertes y sus puntos débiles, precisamente para ayudar a tomar la decisión del grupo de empresarios.

Entre los aspectos positivos resalta que cuenta con un balance sólido y una tasa baja de morosidad. Asimismo, ha diseñado una clara estrategia de banca al por menor y arraigo en la comunidad valenciana. Entre los aspectos negativos destaca la edad media de la plantilla, de 42 años, y una antigüedad de 20 años, que eleva mucho los gastos de personal. También resalta un descenso de los resultados en el primer trimestre del año 1991.

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