La Bolsa de Nueva York supera el índice 3.000

La Bolsa de Nueva York se volvió a colocar al final de la sesión de ayer por encima del índice 3.000, concretamente 3.000,45, al ganar el Dow Jones 30,86 puntos. Esta es la segunda vez que se supera esa barrera psicológica en los últimos dos meses. El pasado 17 de abril se logró llegar a 3.004,46 puntos. Por otro lado, los mercados bursátiles continuaron inmersos en un clima de apatía y aburrimiento sin ser capaces los índices de registrar movimientos dignos de mención. Aparentemente, los inversores anticipan una estabilización de la economía a corto plazo, pues los valores más solicitados fue...

La Bolsa de Nueva York se volvió a colocar al final de la sesión de ayer por encima del índice 3.000, concretamente 3.000,45, al ganar el Dow Jones 30,86 puntos. Esta es la segunda vez que se supera esa barrera psicológica en los últimos dos meses. El pasado 17 de abril se logró llegar a 3.004,46 puntos. Por otro lado, los mercados bursátiles continuaron inmersos en un clima de apatía y aburrimiento sin ser capaces los índices de registrar movimientos dignos de mención. Aparentemente, los inversores anticipan una estabilización de la economía a corto plazo, pues los valores más solicitados fueron los de carácter cíclico, tales como automóviles, papeleras y aluminio.La publicación de una disminución en el número de personas acogidas al subsidio de paro durante la pasada semana contribuyó a afianzar la sensación de estabilización de la economía. En concreto, el número de nuevos parados fue de 445.000 frente a los 454.000 de la anterior. Así mismo, la media de las últimas cuatro semanas fue de 453.000, contra 467.000 en el periodo anterior.

Sin embargo, algunos analistas advierten que es aún demasiado pronto para anticipar tal estabilización, y aconsejan esperar a la próxima semana para conocer el índice de la asociación de directores de compras y la tasa de paro para ver si se confirma la supuesta estabilización. Precisamente, las dudas existentes con respecto a la situación de la economía impiden alzas mayores en la bolsa, al tiempo que traían dudas respecto a la capacidad del índice para atravesar la barrera del 3.000. Otro de los factores que estaban frenando a la bolsa era la reticencia de los mercados de bonos, cuyas rentabilidades se mantienen tenazmente elevadas.