Dimite el director de alta velocidad de Renfe, Leopoldo Iglesia

El máximo responsable del proyecto de alta velocidad en Renfe, Leopoldo Iglesia, ha manifestado a la presidenta de la companía, Mercé Sala, su decisión de abandonar la dirección general de la que es responsable, según han confirmado fuentes de la empresa pública y de la propia dirección de alta velocidad.El cese de Leopoldo Iglesia como máximo responsable de uno de los proyectos ferroviarios más ambiciosos, la línea ferroviaria Madrid-Sevilla, responde, según las mismas fuentes, al mutuo acuerdo entre las partes. La inversión en la línea de alta velocidad y ancho europeo Madrid-Sevilla asciend...

El máximo responsable del proyecto de alta velocidad en Renfe, Leopoldo Iglesia, ha manifestado a la presidenta de la companía, Mercé Sala, su decisión de abandonar la dirección general de la que es responsable, según han confirmado fuentes de la empresa pública y de la propia dirección de alta velocidad.El cese de Leopoldo Iglesia como máximo responsable de uno de los proyectos ferroviarios más ambiciosos, la línea ferroviaria Madrid-Sevilla, responde, según las mismas fuentes, al mutuo acuerdo entre las partes. La inversión en la línea de alta velocidad y ancho europeo Madrid-Sevilla asciende, desde que fuera iniciada hace tres años, a más de 300.000 millones de pesetas según Transportes. La línea estará en servicio en la primavera de 1992.

Leopoldo Iglesia, ex directivo de las empresas Ford, Seat y Motovespa antes de su incorporación a Renfe en 1987 como director de compras y mantenimiento, fue nombrado director de alta velocidad en marzo de 1990, coincidiendo con la reestructuración de Renfe en áreas de negocio impulsada por el anterior presidente y actual ministro de Sanidad, Julián García Valverde.

Iglesia negoció el denominado contrato delsiglo, por el que Renfe adquirió 24 trenes de alta velocidad a la compañía francesa Alsthom y 75 locomotoras a la alemana Siemens. El nuevo equipo responsable de Transportes ha expresado la intención de renegociar la entrega del material adquirido en 1988. La intención es diferir en el tiempo la entrega a Renfe de ocho de los 24 trenes que deberían atender el servicio Madrid-Sevilla por considerar que la demanda quedará cubierta con menos unidades.