A propósito de los zurdos

Leo en EL PAÏS del día 6 de abril que "los usos sociales, hacen que los zurdos vivan menos que los diestros", y debe, añadir que tal cosa no me extraña.Como zurda que soy, vengo observando cómo el mundo que nos rodea está completamente fabricado para los diestros, que serán mayoría, pero no los únicos. Ya no voy a citar el trato injusto que se nos ha dispensado en las escuelas (recuerden aquello de que la mano izquierda era del diablo, o del infierno, o de la República, que todo cabía en el mismo saco), sino que intente) que todos hagamos una pequeña reflexión acerca de los cientos de objetos ...

Leo en EL PAÏS del día 6 de abril que "los usos sociales, hacen que los zurdos vivan menos que los diestros", y debe, añadir que tal cosa no me extraña.Como zurda que soy, vengo observando cómo el mundo que nos rodea está completamente fabricado para los diestros, que serán mayoría, pero no los únicos. Ya no voy a citar el trato injusto que se nos ha dispensado en las escuelas (recuerden aquello de que la mano izquierda era del diablo, o del infierno, o de la República, que todo cabía en el mismo saco), sino que intente) que todos hagamos una pequeña reflexión acerca de los cientos de objetos de uso cotidiano que para los zurdos son un verdadero obstáculo. Valgan al gunos ejemplos y vean o no si tenemos razón: los elernentales abrelatas, sólo utilizables con la mano derecha; los relojes de pulsera, dispuestos a ser colocados en la mano que el diestro maneja menos; las usuales tijeras, aunque ahora se intenta lanzar la "tijera para zurdos", los picaportes de manivela, quese abren con la derecha. salvo previo escorzo de nuestro tórax, las guitarras, que siempre tienen la posibilidad, eso si, de invertir sus cuerdas; las marchas y los pedales de nuestros vehículos, preparados para operar con la mano y pie que más sensibilidad tienen, la propia escritura, que nos obliga a realizar cierta contorsión de muñeca si no queremos emborronar lo escrito, ciertas sillas para estudiantes con mesita incorporada, ni que decir tiene que también preparadas para diestros.

Puestas así las cosas, no me extraña en absoluto una de las conclusiones del estudio al que hago referencia. Ciertamerte los zurdos siempre necesitamos "un momento más" para decidir cerebralmente con qué mano vamos a actuar. Lo realmente curioso y sorprendente es ver cómo todos, o la gran mayoría de zurdos, nos hemos adaptado y aprendido a sobrevivir en un mundo al revés.-