El Barca aspira a romper sa mala racha en las Copas de Europa

ENVIADO ESPECIAL, El Barcelona dispone hoy (20.30, La 2) de una nueva ocasión histórica -la tercera- de conquistar por primera vez la Copa de Europa en la final que le enfrentará al Pop 84 de Split, campeón de las dos últimas ediciones, en las que fue el verdugo de¡ equipo azulgrana. La mala racha en las finales de la Copa de Europa afecta también al fútbol, donde el Barcelona ha perdido las dos finales que ha jugado.

Todos son conscientes de lo que hoy se pone en juego: la oportunidad de culminar el extraordínario caudal que ha manado de una generación comandada por Epi y Solozábal, de...

ENVIADO ESPECIAL, El Barcelona dispone hoy (20.30, La 2) de una nueva ocasión histórica -la tercera- de conquistar por primera vez la Copa de Europa en la final que le enfrentará al Pop 84 de Split, campeón de las dos últimas ediciones, en las que fue el verdugo de¡ equipo azulgrana. La mala racha en las finales de la Copa de Europa afecta también al fútbol, donde el Barcelona ha perdido las dos finales que ha jugado.

Todos son conscientes de lo que hoy se pone en juego: la oportunidad de culminar el extraordínario caudal que ha manado de una generación comandada por Epi y Solozábal, de acabar con la bestia negra en que se ha convertido el Pop 84 -vencedor en la semifinal ante el Scavolini por 93-87-, y de ofrecer el primer título al máximo nivel continental a una institución que lo persigue sin fortuna, en deportes tan diversos como el fútbol, el balonmano y el baloncesto.El actual campeón yugoslavo y europeo encarna el papel de lo que hasta hace unas semanas había sido el Milan en el fútbol continental. Pese a que este año su plantilla casi ha sido desmantelada (han desaparecido talentos de la categoria de Radja, Sobin e Ivanovic), se ha ganado con mérito innegable el derecho a defender su cetro hasta el final.

Un cambio de bando puede ser clave en la Final de hoy. La presencia de Bozldar Maljkovic, ex entrenador del Jugoplást ca, en el banquillo del Barcelona debe justificarse esta noche. En el subconsciente de quienes le conocen, tanto yugoslavos como españoles, estarán los dos precedentes que se trae en su maleta hasta París. En la liguilla previa hizo ver a su ex equipo que podía lamentarse tanto de la pérdida de Radia como de la suya, puesto que le infligió sendas derrotas: en Split, 87-9 1, y en el Palau Sant Jordi, 92-85.

Si el conjunto yugoslavo puede aducir el éxodo de algunas de sus figuras coi-no eximente, no es menos cierto que el cuadro azulgrana cuenta con las bajas de Jiménez y Crespo y con tan sólo seis jugadores senior. Ambos equipos, no obstante, mantienen intacta su fuerza motriz. El Barcelona, con el triángulo formado por Solozábal, Epi y Norris, y el Pop 84 con la joya del baloncesto europeo Toni Kukoc, que desea culminar la colección de títulos para el equipo antes de emprender el camino que le conduzca la próxima temporada probablemente a Italia. El marcaje al espigado y polifacético líder del Pop 84 se perfila como el argumento esencial de la final.

Epi y Solozábal son los úmcos supervivientes de las dos finales previas del Barcelona: en 1984 frente al Banco di Roma(73-79), y el año pasado ante el equipo de Split (67-72). Curiosamente, del equipo que saltará hoy a la cancha tan sólo ellos y Norris sobreviven respecto al año pasado: Crespo y Jiménez están lesionados, Costa, Wood y Ferran se han marchado, y Trumbo estuvo ausente por lesión.

El único equipo español que ha ganado la competición es el Madrid, que en 1980 marcó un récord al suniar siete títulos.