Becker-Edberg, duelo titánico

V. J. Wimbledon es el templo tenístico más exclusivo del mundo. Así, debe entenderse que Boris Becker (República Federal de Alemania, 2), de 22 años, y Stefan Edberg (Suecia, 3), de 24, disputen hoy por tercer año consecutivo (15.00, TV-2), la final más prestigiosa del circuito profesional, algo que en Londres no sucedía desde 1891, cuando Wilfred Baddeley y Joshua Pim dirimieron el preciado trofeo en cuatro ediciones consecutivas.

El dato encierra la peculiaridad de este torneo. Edberg y Becker se mueven como nadie por la delicada hierba londinense. Desde su anodina presentación en 19...

V. J. Wimbledon es el templo tenístico más exclusivo del mundo. Así, debe entenderse que Boris Becker (República Federal de Alemania, 2), de 22 años, y Stefan Edberg (Suecia, 3), de 24, disputen hoy por tercer año consecutivo (15.00, TV-2), la final más prestigiosa del circuito profesional, algo que en Londres no sucedía desde 1891, cuando Wilfred Baddeley y Joshua Pim dirimieron el preciado trofeo en cuatro ediciones consecutivas.

El dato encierra la peculiaridad de este torneo. Edberg y Becker se mueven como nadie por la delicada hierba londinense. Desde su anodina presentación en 1984, el alemán sólo ha faltado un año a la final y ha conseguido tres títulos (1985, 1986 y 1989), el primero de ellos con la edad récord de 17 años y 3 meses. De derrotar hoy a Edberg, Becker se convertiría en el primer jugador desde Bjorri Borg que gana cuatro títulos en Wimbledon. El sueco consiguió cinco seguidos entre 1976 y 1980.

En 1990, el campeón alemán ha ganado dos torneos (Bruselas y Stuttgart) y ha caído en dos finales (Hamburgo y Queens). Sobre hierba sólo ha cedido un encuentro de dos disputados, a lo que Edberg opone otro dato demoledor: en la pista central ha sumado 13 victorias por 2 derrotas. El sueco, campeón en 1988, también ha conseguido dos títulos esta temporada (Indian Wells y Japón) y sólo posee en el circuito cuatro triunfos menos que Becker (22 contra 26). Sin embargo, es el peor rival que podía haberle tocado. Si Becker sirve portentosamente, Edberg resta con no menos calidad. Si el primero lucha por cada pelota hasta la extenuación, el segundo juega en la red como un maestro. El duelo será, por explosivo e intenso, una delicia para los sentidos.

Ambos jugadores se han enfrentado en 24 ocasiones, con 15 victorias a favor de Becker. En hierba, el alemán ha ganado tres de sus cuatro encuentros, el último en la final del pasado año. Sin embargo, en partidos de Grand Slam es el sueco el que domina, con dos victorias (final de Wimbledon de 1988 y semifinales de Roland Garros de 1989) y una sola derrota.