Crítica:

Sólo se vive una vez

22.35 / TVE1You only live once, 1937 (86 minutos). Director: Fritz Lang. Intérpretes: Sylvia Sydney, Henry Fonda, Barton McLaine.Dos jóvenes como Eddle y Helen deberían competir con las montañas en grandeza, palpar con sus yemas la textura de la dicha. Pero su sino es opuesto a todo referente a la felicidad. Eddie es encarcelado por tercera vez y, en esta ocasión, condenado a muerte por un delito que no cometió; en su desesperación, y cuando ya, sin él saberlo, su inocencia ha sido probada, huirá y matará a un sacerdote. El falso culpable se hace verdadero por los infortunios del...

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22.35 / TVE1You only live once, 1937 (86 minutos). Director: Fritz Lang. Intérpretes: Sylvia Sydney, Henry Fonda, Barton McLaine.Dos jóvenes como Eddle y Helen deberían competir con las montañas en grandeza, palpar con sus yemas la textura de la dicha. Pero su sino es opuesto a todo referente a la felicidad. Eddie es encarcelado por tercera vez y, en esta ocasión, condenado a muerte por un delito que no cometió; en su desesperación, y cuando ya, sin él saberlo, su inocencia ha sido probada, huirá y matará a un sacerdote. El falso culpable se hace verdadero por los infortunios del azar y, sobre todo, por esa lacra social que impide la emanación natural del ser. Fritz Lang lo entiende muy bien y nos lo hace entender muy bien. Sólo se vive una vez es un filme todavía más feroz que su precedente Furia. El conjunto es una obra perfecta de pies a cabeza, sobrecogedora. Los actores, en el podio mismo de la maestría.

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