Las Fuerzas Armadas han reducido el 15% de sus efectivos en los últimos cinco años

Las consecuencias de los acuerdos de desarme de Viena serían mucho más traumáticas para las Fuerzas Armadas españolas si éstas no hubieran reducido unilateralmente sus efectivos, aseguraba recientemente el ministro de Defensa, Narcís Serra. Desde 1985, y como consecuencia de las leyes de plantillas de los tres ejércitos, el número de profesionales de la milicia se ha reducido en 10.000, lo que equivale a un 15% del total. Sin embargo, la reducción no ha podido evitar notables desajustes.

Entre los desajustes se encuentra el hecho de que el Ejército de Tierra. debe prescindir todavía de ...

Las consecuencias de los acuerdos de desarme de Viena serían mucho más traumáticas para las Fuerzas Armadas españolas si éstas no hubieran reducido unilateralmente sus efectivos, aseguraba recientemente el ministro de Defensa, Narcís Serra. Desde 1985, y como consecuencia de las leyes de plantillas de los tres ejércitos, el número de profesionales de la milicia se ha reducido en 10.000, lo que equivale a un 15% del total. Sin embargo, la reducción no ha podido evitar notables desajustes.

Entre los desajustes se encuentra el hecho de que el Ejército de Tierra. debe prescindir todavía de la mitad de sus coroneles, antes de que acabe el año, para cumplir las previsiones legales.Dos han sido los mecanismos utilizados por el Ministerio de Defensa para ajustar los efectivos de los Ejércitos a lo previsto en las leyes de plantillas: la reducción del número de ingresos en las academias (que han pasado de 996 en 1985 a 845 en 1989) y, sobre todo, la creación de la reserva transitoria a la que han podido acogerse voluntariamente los, militares que deseaban abandonar el servicio activo, conservando la totalidad de las remuneraciones, salvo las ligadas al destino.

Un total de 10.742 militares han pasado a la reserva transitoria o, lo que es lo mismo, se han retirado anticipadamente, desde 1985; y, al menos, otros 1.068 podrán hacerlo a lo largo de este año, según las previsiones del departamento de Defensa. No todos ellos han supuesto, sin embargo, una reducción de efectivos, ya que algunos, por su edad, estarían de todas formas retirados a 1 de enero de 1991, fecha en la que debe haberse completado el ajuste de las plantillas.

Desequilibrios

La reducción ha supuesto para las Fuerzas Armadas pasar de 66.591 profesionales en 1985, año en se inició el proceso, a 56.651 a 1 de febrero pasado; sin contar a los 821 integrantes de los cuerpos unificados jurídico y de intervención. El recorte más sensible se ha producido en el Ejército de Tierra, que ha perdido 6.433 profesionales (15%). El Ejército del Aire se ha quedado sin 1.494 miembros (11%) y la Armada, sin 1.107 (10%).El proceso de ajuste de las plantillas no se ha hecho sin notables desequilibrios entre los distintos empleos. El número de tenientes generales sigue siendo excesivo (27) y su reducción difícil, hasta el punto de que los que deben eliminarse antes de que acabe el año (7) son tantos como los que se han eliminado desde 1985. Con todo, el mayor desajuste se produce en el empleo de coronel, donde sobran 619 en los tres ejércitos, más del 35% del total. Sólamente al Ejército de Tierra le sobran 519 coroneles, casi la mitad de todos los que tiene, de los que debería prescindir en los próximos ocho meses para cumplir con su ley de plantillas.