Una firma británica adquiere el 10,45% que Banesto tenía en la Sociedad General Azucarera de España
La venta del 10,45% del capital de la Sociedad General Azucarera de España que llevó a cabo Banesto la pasada semana se hizo a una sociedad británica -E. D. & F. Man- comercializadora de buena parte del comercio internacional del azúcar cubano, brasileño y de otros países productores. El Banco Central, el otro gran accionista de Azucarera, no ha participado en la operación, aunque fuentes cercanas a la entidad recuerdan la decisión del banco presidido por Alfonso Escámez; de aumentar su presencia en la sociedad.
Banesto ya no tiene posiciones accionariales en el sector azucarero español...
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La venta del 10,45% del capital de la Sociedad General Azucarera de España que llevó a cabo Banesto la pasada semana se hizo a una sociedad británica -E. D. & F. Man- comercializadora de buena parte del comercio internacional del azúcar cubano, brasileño y de otros países productores. El Banco Central, el otro gran accionista de Azucarera, no ha participado en la operación, aunque fuentes cercanas a la entidad recuerdan la decisión del banco presidido por Alfonso Escámez; de aumentar su presencia en la sociedad.
Banesto ya no tiene posiciones accionariales en el sector azucarero español, sometido en los últimos meses a fuertes movimientos tras la decisión de Ebro e Industrias Agrícolas de caminar hacia la fusión de las dos empresas, y el mantenimiento de General Azucarera como el otro polo del sector.El grupo KIO ejercerá el control en las dos primeras sociedades, junto con el Banco Santander que mantiene su posición inicial e, incluso ha adquirido el paquete de Agrícolas que tenía Banesto. En la Sociedad General Azucarera sería el Banco Central el socio dominante, aunque la venta del paquete de Banesto podría haber desequilibrado en parte este reparto.
La operación de venta de las acciones de Banesto, algo más de 700.000 por las que se ha pagado 4.430 millones de pesetas, la llevó a cabo la división de banca de negocios de la entidad financiera y se formalizó a través de Lombardía y Lacaci, sociedad de valores y bolsa participada por el propio Banesto. La venta se ha hecho "`con un cliente tradicional de la división de banca corporativa de Banesto", señalaron en la entidad.
Estas mismas fuentes negaron que la operación fuera el primer paso para que las acciones de Azucarera acabaran en la cartera del Banco Central a cambio de la participación que el banco presidido por Escámez tiene en Carburos Metá icos, como ocurrió con el intercambio efectuado por el Santander y Banesto con Agrícolas y Carburos.
Operación difícil
En medios cercanos al Banco Central se señalaba también este hecho señaíando que "existía la convicción desde hace tiempo de la incapacidad de llegar a un intercambio de acciones". "Mantenemos nuestra posición accionarial en Azucarera, aunque es bastante probable que el banco la aumente en los próximos meses, lo mismo que seguimos teniendo las acciones de Carburos Metálicos".En el mapa del sector azucarero español que se está dibujando aparecen como socios financieros, y por lo tanto como principales canalizadores del negocio derivado, el Banco Central y el Santander. El último a través de Ebro / Agrícolas, donde mantendrá una presencia de relativa importancia accionarial y, sobre todo, será el único banco en el consejo de administración. El Central sigue siendo el principal accionista de Azucarera, con tendencia a aumentar su participación -se ha llegado a especular que el banco y sus filiales estarían dispuestos a ampliarla hasta cerca del 40%-, similar a la que ahora tiene la sociedad in glesa y bastante por encima del 6,74% que posee la empresa suiza Lombard y el 5,34% que tieae Mercapital.
E. D. F. & Man es una empresa de comercialización de azúcar, café y cacao en los mercados internacionales que, a través de una filial, ha venido operando en España en los últimos cuatro años y que tiene una participación accionarial cercana al 10% en la sociedad Tabacos de Filipinas. Fuentes de la sociedad inglesa declararon ayer que la decisión de invertir en Azucarera debe interpretarse como una toma de posición ante la formación del mercado único europeo y el proceso de concentración del sector en España que, de que darse fuera del mismo, dificultaría las operaciones de intermediación que se llevan a cabo.