Internos de la cárcel de Huesca denuncian al director por inducción al suicidio de un preso

Un colectivo de presos de la cárcel de Huesca que asegura representar a la práctica totalidad de los mismos ha publicado un escrito en el que denuncia posibles responsabilidades criminales por parte de la dirección del centro y dos funcionarios en el suicidio de un interno. José Luis García Horcajada, de 27 años, natural de Rubielos (Teruel), aunque procedente de Valencia, fue encontrado colgado de la cisterna de su celda el pasado miércoles Cuando lo descolgaron los funcionarios aún se hallaba con vida, aunque ingresó cadáver en el hospital.El colectivo de presos señala en su escrito que de l...

Un colectivo de presos de la cárcel de Huesca que asegura representar a la práctica totalidad de los mismos ha publicado un escrito en el que denuncia posibles responsabilidades criminales por parte de la dirección del centro y dos funcionarios en el suicidio de un interno. José Luis García Horcajada, de 27 años, natural de Rubielos (Teruel), aunque procedente de Valencia, fue encontrado colgado de la cisterna de su celda el pasado miércoles Cuando lo descolgaron los funcionarios aún se hallaba con vida, aunque ingresó cadáver en el hospital.El colectivo de presos señala en su escrito que de los hecho "bien podría derivar en responsabilidades criminales contra la dirección del centro y dos funcionarios que han estado persiguiendo con saña, enconadamente, a José Luis García Horcajada, induciéndole al suicidio como única salida a la situación límite y drástica en que se encontraba".

"Hostigamiento y acoso"

El recluso fallecido llevaba tres días en huelga de hambre en protesta "por el hostigamiento y acoso a que estaba sometido", según el escrito de los reclusos sábado día 10 manifestó ante testigos al médico del centro que no podía soportar más la tensión a que estaba sometido y que no encontraba argumentos para seguir viviendo, dejando patente su intención de suicidio, porque la dirección del centro hacía caso omiso a sus quejas y estaba empecinada en destruirle psicológicamente y arruinarlo penalmente incrementando su condena mediante partes disciplinarios carentes de lógica y sentido. Era notorio que los funcionarios llamados Justo y Cara Cortada le habían amenazado en numerosas ocasiones con arruinarlo. García Horcajada cursó varias instancias al director del centro para ponerle en antecedentes de estas amenazas, y haciendo gala de la característica prepotencia y grosera petulancia, se negó a recibirlo. Estos hechos agravaron la delicada situación psico-física del finado, y ante esta impotencia que le saturaba tomó la patética y drástica decisión de poner fin a sus sufrimientos", según el referido escrito.

Fuentes de la dirección del centro y de la sección sindical de Comisiones Obreras han negado tales acusaciones o las consideran exageradas y que no corresponden a la realidad. Por su parte, la asociación de familiares y amigos de presos y ex presos, si bien no había recibido denuncia sobre los hechos, ha anunciado que tratará de esclarecerlos.