Campaña calumniosa

Vuelvo a dirigirme a sus páginas, restando unas líneas a otros lectores, en la espera de que su prestigioso periódico independiente haga justa demostración de su democrático proceder.No creía, al remitir mi anterior carta, de fecha 1 del pasado octubre, merecer la atención del más alto cargo del Inem y menos aún recibir líneas cargadas de calumnias y de propaganda para la nula actuación de su organismo. Adjunto fotocopia del certificado a mi nombre emitido por el Inem conforme he pasado, en fecha 29 de septiembre de 1989, la prueba que ellos califican, con prosopopeya bananera, "certificado de...

Vuelvo a dirigirme a sus páginas, restando unas líneas a otros lectores, en la espera de que su prestigioso periódico independiente haga justa demostración de su democrático proceder.No creía, al remitir mi anterior carta, de fecha 1 del pasado octubre, merecer la atención del más alto cargo del Inem y menos aún recibir líneas cargadas de calumnias y de propaganda para la nula actuación de su organismo. Adjunto fotocopia del certificado a mi nombre emitido por el Inem conforme he pasado, en fecha 29 de septiembre de 1989, la prueba que ellos califican, con prosopopeya bananera, "certificado de profesionalidad", a fin de demostrar la mentira de que las pruebas profesionales demuestran

también la escasa ocupabilidad de la señora Sánchez Barragán como administrativa". Es falso también que yo me negase a realizar la prueba mecanográfica, que era optativa, y el señor De Eusebio lo ignora, como ignora que no he perdido "las capacidades profesionales" como él dice contra la palabra de su Inem.ç

Falso, otra vez, que haga cinco años que abandoné el trabajo: desde 1978 no trabajo para la empresa privada. Decía Spinoza: Ignorantia non est argumentum. Cierto, sin embargo, y muy triste, es que se me dio, junto a otros pobres desempleados, una charla a fin de que nos enterásemos de que no sabíamos buscar trabajo, llamada eufemísticamente "Programa informativo de búsqueda de empleo"; lo que concuerda, esto sí, con las más tristes, por lo ineficientes, palabras del señor director general: "En la mayoría de los casos también es precisa la instrucción en las mencionadas técnicas de búsqueda de enipleo".

En lo referente a los cursos de formación ocupacional, a los cuales no he tenido acceso en los años que llevo inscrita, se me dijo que el número de desempleados desborda la capacidad de los mismos, con lo cual yo no tenía posibilidad de acceder a ellos. ¿Para qué, pues, sirve el Inem sino para cargar aún más de impuestos a los españoles? ¿No es una burla decir que en octubre de este año se han creado casi medio millón de puestos de trabajo? Mi protesta ha sido dirigida ya al Defensor del Pueblo.-