La directiva del Barça, alarmada por el bajo rendimiento del equipo

La directiva del Barcelona, y muy especialmente su presidente, Josep Lluís Núñez, está alarmada por el bajo rendimiento del equipo durante los partidos de pretemporada y máxime después de perder, el pasado martes, frente al modesto Palamós (2-1), y dos días antes, frente al Figueres. A 48 horas del inicio de la Liga existe temor encubierto en todos los estamentos del club. La labor del técnico Johan Cruyff todavía no ha sido puesta en tela de juicio, pero si la de Koeman. El partido del sábado en Valladolid es clave. Una derrota podría desencadenar una crisis.Núñez, durante el acto de presenta...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

La directiva del Barcelona, y muy especialmente su presidente, Josep Lluís Núñez, está alarmada por el bajo rendimiento del equipo durante los partidos de pretemporada y máxime después de perder, el pasado martes, frente al modesto Palamós (2-1), y dos días antes, frente al Figueres. A 48 horas del inicio de la Liga existe temor encubierto en todos los estamentos del club. La labor del técnico Johan Cruyff todavía no ha sido puesta en tela de juicio, pero si la de Koeman. El partido del sábado en Valladolid es clave. Una derrota podría desencadenar una crisis.Núñez, durante el acto de presentación del homenaje a Migueli -se celebrará el cinco de septiembre frente a la selección de Bulgaria-, se negó a comentar la situación. Al presidente azulgrana se lo llevaron casi en volandas algunos de sus directivos para que no realizara ninguna manifestación que pudiera romper la calma ficticia que existe en la plantilla. Pero tanto él como sus directivos están "muy alarmados", según fuentes próximas al mandatario azulgrana. Hasta el presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, comparte las inquietudes de los directivos barcelonistas. Pujol, que presenció el encuentro Palamós-Barça, manifestó, que "este Barcelona me hace sufrir, jugando con tan sólo tres defensas".

Varios directivos consultados por este diario, que prefieren guardar el anonimato, también fueron rotundos al afirmar: "No nos gusta como está jugando el equipo, pero creemos que no es culpa del sistema, que funcionó perfectamente la pasada temporada hasta el punto de que el Barça fue el equipo menos goleado del campeonato, junto al Valencia. El problema radica en la programación de la pretemporada, que ha estado cargada de partidos amistosos, provocando la saturación de los jugadores".

Otro directivo todavía hiló más fino, argumentando que la culpa momentánea de todos los males se llama Koeman: "Es evidente que el holandés es un gran jugador pero creo que no debería iniciar la Liga porque no está en forma". Cruyff, por su parte, sigue restando importancia a las derrotas de los últimos amistosos y defendiendo a Koeman.

Archivado En