La comisión investigadora culpa a la policía de la tragedia de Sheffield

El informe preliminar de la comisión nombrada por el Gobierno británico para analizar las causas de la tragedia del estadio del Sheffield confirmó ayer las primeras conclusiones y achacó la máxima responsabilidad de lo ocurrido a la "falta de una adecuada operación de control policial". La principal recomendación del informe es que se reduzca en un 15% la máxima capacidad de acogida de espectadores en las gradas. La tragedia se produjo el pasado 15 de abril, en Hillsborough, donde 95 personas murieron y otras 170 resultaron heridas como consecuencia de las avalanchas producidas en una gra...

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El informe preliminar de la comisión nombrada por el Gobierno británico para analizar las causas de la tragedia del estadio del Sheffield confirmó ayer las primeras conclusiones y achacó la máxima responsabilidad de lo ocurrido a la "falta de una adecuada operación de control policial". La principal recomendación del informe es que se reduzca en un 15% la máxima capacidad de acogida de espectadores en las gradas. La tragedia se produjo el pasado 15 de abril, en Hillsborough, donde 95 personas murieron y otras 170 resultaron heridas como consecuencia de las avalanchas producidas en una grada del estadio.

La comisión ha concluido que la principal responsabilidad recae en la falta de previsión de la policía para hacer frente a la masiva llegada de aficionados en los minutos previos al comienzo del partido, o para solventar el problema de una posible saturación de espectadores. Acusa a la policía de carencia de liderazgo para resolver los problemas planteados y de complacencia.

El informe hace recaer la mayor responsabilidad individual en el jefe superintendente de Policía que estaba al cargo de la operación, David Duckenfield. Los comisionados le califican de inexperto -era su primera operación en un campo de fútbol-, de haber fracasado a la hora de establecer guías inteligibles y precisas y de "quedar paralizado" cuando la tragedia se desarrollaba.

No se culpa a la policía por abrir la puerta exterior al estadio, por la que entró la avalancha de hinchas que originó la masacre, sino por dirigirles hacia los accesos laterales de la grada, dejando que la mortal avalancha se formara bajo la puerta de acceso central. El informe señala que David Duckenfield no había visitado el estadio antes del partido para diseñar la operación y resalta el contraste entre los testimonios "defensivos y evasivos" de los altos mandos policiales ante la comisión investigadora y los de los policías de menor rango, que la comisión considera positivos y abiertos.

Minutos después de conocerse el informe, el jefe de policía de la región de Yorkshire, Peter Wright, presentó su dimisión. Duckenfield fue inmediatamente suspendido en sus funciones.

El informe preliminar recomienda que las puertas de las vallas que rodean el campo permanezcan abiertas y que cada una sea vigilada por un policía, que tendrá como única misión la supervisión de los espectadores. En contra de la opinión de los clubes, el informe no recomienda el levantamiento de la prohibición de venta de alcohol en el interior de los estadios.

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