El dólar se estabiliza por debajo de los dos marcos

La cotización del dólar se estabilizó en torno a niveles ligeramente superiores a los de la sesión anterior, siendo la ausencia de nuevas noticias al factor principal. La banda de fluctuación, no obstante, fue amplia, moviéndose las paridades en 1,9890 y 1,9690 marcos. A media sesión, en Nueva York, la paridad se situaba a 1,98 marcos, denotándose cierto nivel de firmeza. A corto plazo, sin embargo, los analistas opinan que la divisa norteamericana podría descender hasta los 1,95 marcos y 143 yens. En cualquier caso la existencia de numerosos factores en su favor sugieren que el billete...

La cotización del dólar se estabilizó en torno a niveles ligeramente superiores a los de la sesión anterior, siendo la ausencia de nuevas noticias al factor principal. La banda de fluctuación, no obstante, fue amplia, moviéndose las paridades en 1,9890 y 1,9690 marcos. A media sesión, en Nueva York, la paridad se situaba a 1,98 marcos, denotándose cierto nivel de firmeza. A corto plazo, sin embargo, los analistas opinan que la divisa norteamericana podría descender hasta los 1,95 marcos y 143 yens. En cualquier caso la existencia de numerosos factores en su favor sugieren que el billete verde podría volver a intentar situarse por encima de los 2,00 marcos una vez transcurrida la fase de corrección actual.

La relativa firmeza demostrada por el dólar favoreció a los mercados financieros en EE UU y en especial al de renta fija, donde los bonos a 30 años mejoraban ligeramente su cotización, pasando las rentabilidades en plazos a 30 años al 8,3% frente a 8,34% anterior. La Bolsa de Nueva York permaneció anodina, en línea con el escaso volumen de negocio de la jornada precedente. Al cierre, el índice Dow Jones cedía 7,02 puntos hasta situarse en el 2.472,88.

En Europa, la Bolsa de París consiguió situarse al alza a pesar de las noticias negativas referentes a la inflación. El IPC relativo a mayo aumentó un 0,4%, lo cual sitúa la tasa interanual al 3,7%, es decir, la más alta desde enero de 1986. Por su parte, en la RFA, la Bolsa de Francfort, registró un nuevo máximo post-crash por segunda sesión consecutiva. Aparentemente, el resultado de las elecciones europeas ha tranquilizado a los inversores germanos, ya que el descenso del partido conservador no ha sido superior a lo anticipado. Por otra parte, no se espera un endurecimiento de la política monetaria por parte del Bundesbank.