Todo un nombre

, Tal vez haya sido en buena parte por su sonoro apellido, pero la realidad es que no ha habido ni quizá exista en toda la historia del automovilismo otro nombre de piloto más familiar, ni más repetido, para calificar irónicamente a cualquier conductor. Tal vez no haya sido el mejor si se recuerdan nombres como los británicos Jim Clark y Jackie Stewart, el argentino Juan Manuel Fangio o sus compatriotas Piquet y Senna. Pero él sí aprovechó como nadie su momento y la popularidad con las transmisiones mundiales televisadas del circo.

Emerson Fittipaldi estuvo 11 años en la Fórmula 1, dis...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

, Tal vez haya sido en buena parte por su sonoro apellido, pero la realidad es que no ha habido ni quizá exista en toda la historia del automovilismo otro nombre de piloto más familiar, ni más repetido, para calificar irónicamente a cualquier conductor. Tal vez no haya sido el mejor si se recuerdan nombres como los británicos Jim Clark y Jackie Stewart, el argentino Juan Manuel Fangio o sus compatriotas Piquet y Senna. Pero él sí aprovechó como nadie su momento y la popularidad con las transmisiones mundiales televisadas del circo.

Emerson Fittipaldi estuvo 11 años en la Fórmula 1, disputó 144 grandes premios y ganó 14. El primero, su cuarta carrera, el Gran Premio de Estados Unidos, en 1970. En 1972, en su primera temporada completa, logró el primer título mundial; fue subcampeón en 1973, volvió a ganarlo en 1974 y de nuevo terminó segundo en 1975, cuando fue el único capaz de plantar cara al tremendo Ferrari 312 T2 del campeón Niki Lauda.

Más información

Archivado En