Los constructores españoles piden que Renfe anule un concurso para 400 vagones

La Asociación de Constructores Españoles de Material Rodante Ferroviario (Cemafe) ha expresado al presidente de Renfe Julián García Valverde, su malestar ante la convocatoria de carácter internacional realizada por la empresa pública el pasado 4 de enero, en la que solicita ofertas para el suministro de 200 vagones destinados al transporte de bobinas y otros 200 vagones de bogies con paredes deslizantes.

Los constructores han dirigido además sendas cartas a los ministros de Transportes, José Barrionuevo, e Industria, Claudio Aranzadi, en las que explican las razones de su malestar y...

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La Asociación de Constructores Españoles de Material Rodante Ferroviario (Cemafe) ha expresado al presidente de Renfe Julián García Valverde, su malestar ante la convocatoria de carácter internacional realizada por la empresa pública el pasado 4 de enero, en la que solicita ofertas para el suministro de 200 vagones destinados al transporte de bobinas y otros 200 vagones de bogies con paredes deslizantes.

Los constructores han dirigido además sendas cartas a los ministros de Transportes, José Barrionuevo, e Industria, Claudio Aranzadi, en las que explican las razones de su malestar y piden su mediación para que Renfe anule la convocatoria y evite en adelante "el ámbito internacional de los concursos". Cemafe recuerda en las cartas dirigidas a los ministros que "en repetidas ocasiones voces autorizadas del Gobierno han manifestado que el Plan de Transporte Ferroviario (PTF) se va a llevar a cabo, en su mayor parte, por la industria española".En su opinión, dichas manifestaciones chocan con la política de compras que está llevando a cabo Renfe. Así explican que ya en febrero del pasado año Renfe convocó un concurso internacional para el suministro de 200 vagones para contenedores que provocó su queja y la petición de anulación del mismo. Según afirman, la contestación por parte de la empresa fue que el caso tenía un carácter especial y que serviría para contrastar precios de la industria española con la industria internacional. No obstante, en julio de 1988 se convocó otro concurso de ámbito internacional para el suministro de 200 vagones articulados que, de nuevo, dio lugar a protestas.

La dirección de Renfe afirma, por su parte, que "el concurso de los 400 vagones convocado el 4 de enero responde a la necesidad de conseguir un producto de calidad a buen precio y con la vista puesta en 1992, año a partir del cual será obligatoria la apertura de los mercados públicos".

Los constructores aseguran en sus misivas que las convocatorias internacionales "deterioran la imagen de la industria española en su proyección exterior", y solicitan que la liberalización del mercado español se realice al mismo tiempo que en el resto de los países.

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