Los patrocinadores de los deportes olímpicos consideran que su inversión no es rentable

Las empresas patrocinadoras que comenzaron el año pasado sus inversiones en la Asociación de Deportes Olímpicos Barcelona 92 (ADO-92) se muestran contrariadas por la experiencia. Fundamentalmente se quejan de la falta de apoyo por parte de Televisión, uno de los socios de la ADO, junto al Consejo Superior de Deportes (CSD) y el Comité Olímpico Español (COE). Cuatro deportes de combate, boxeo, yudo, lucha y tiro, nunca han tenido patrocinador, y algunas de las empresas estudian retirar su ayuda económica. Pikolín y Uralita son las empresas más radicales en sus críticas. Pero de momento los patr...

Las empresas patrocinadoras que comenzaron el año pasado sus inversiones en la Asociación de Deportes Olímpicos Barcelona 92 (ADO-92) se muestran contrariadas por la experiencia. Fundamentalmente se quejan de la falta de apoyo por parte de Televisión, uno de los socios de la ADO, junto al Consejo Superior de Deportes (CSD) y el Comité Olímpico Español (COE). Cuatro deportes de combate, boxeo, yudo, lucha y tiro, nunca han tenido patrocinador, y algunas de las empresas estudian retirar su ayuda económica. Pikolín y Uralita son las empresas más radicales en sus críticas. Pero de momento los patrocinadores siguen a la espera de un cambio sustancial, sin pensar en descolgarse de la publicidad para 1992.

El primer año de la ADO ha sido un desastre publicitariamente para las empresas. Las causas son, según han reconocido sus propios responsables, la falta de sensibilidad de televisión, y el hecho de que la propia ADO no se ha preocupado de cuidar a sus patrocinadores al estar más inmersa en solucionar sus carencias estructurales. Incluso ahora, en 1985), se han desaprovechado publicitariamente la mayoría de los programas monográficos sobre cada deporte que se emiten en la segunda cadena (Vía Olímpica, 21 horas). Esto se solucionará, al parecer, en el mes de febrero. Pero deportes minoritarios que no pueden verse habitualmente en televisión han perdido ya o pueden perder su compensación publicitaria.El caso de Pikolín, que pagó 40 millones por el tiro con arco en 1988, puede ser un ejemplo. Este misma semana sus directivos quieren hablar con Javier Gómez Navarro, secretario de Estado para el Deporte, para expresarle su gran descontento y anunciarle que abandonarán el proyecto si no se ven compensados. Los directivos de P¡kolín trataron de que en el programa Por la mañana hubiese una exhibición con su publicidad, pero TVE se negó.

Uralita, que apoya el pentatlón moderno con otros 40 millones, también ha querido retirar su apoyo al creer que su imagen se vería perjudicada tras el doping del pentatleta español Quesada en Seúl. En ambos casos se estudia la solución de que se integren en el grupo de empresas que patrocinan la ADO, sin apoyar a un deporte concreto, como sucede con Bansander, Nutrexpa, ONCE o Puig.

Ayer mismo, Banesto y ADO trataban de encontrar una solución a su patrocinio. Banesto pagó 125 millones por la hípica y patrocina a los dos mejores jinetes, Álvarez Cervera y Sánchez Alemán. Pero ahora quiere inversiones más concretas.

La historia de la ADO-92 ha sido una continua peripecia. Los cambios han sido numerosos. Primero se descolgó la empresa Dorna, promotora de la idea; luego, su director deportivo, Manuel Fonseca, que pasó al COOB 92; después, el gerente Javier García Atance no pudo dedicarle el tiempo preciso, y fue sustituido por Juan Miguel Hernández León, ex director general del CSD, que se ha encontrado con todas las quejas. Ahora está tratando de tapar los agujeros y una de las medidas ha sido el cese de la colaboración con la Agencia A de Alfredo Fraile.

Mientras tanto se han producido situaciones especialmente graves que pudieron dar al traste con todo el proyecto. A la dificultad para encontrar patrocinadores en muchos deportes se unió la ignorancia y rebeldía de las federaciones en la entrega de los planes deportivos.

Ciclismo, devuelto

Precisamente en cuanto a los programas deportivos, la ADO-92 se encuentra en la recta final de negociaciones para aprobar los de este año. Tras el caos inicial de 1988, esta vez los problemas son algo menores al haberse sistematizado las peticiones a cada deporte. Todas las federaciones parecen haber aceptado las reglas del juego, porque existe el atractivo de un dinero abundante por medio, pero los problemas continúan. Todo se ha retrasado por la celebración de los Juegos de Seúl y de las elecciones en la mayoría de las federaciones.El programa de ciclismo, por ejemplo, se ha devuelto a la federación para que lo reestructure totalmente. Hípica no lo ha entregado. Deportes de invierno y gimnasia presentan demasiados nombres cuando es prácticamente imposible que sean finalistas en 1992 o ganen medallitas, como se pretende. Los únicos deportes que han cumplido las peticiones de la ADO-92 son balonmano, pelota y hockey sobre patines.