El 77%, de la población ocupada desea negociación sin huelgas
EL PAÍS, Los indicadores de opinión muestran entre la población ocupada la misma y masiva aspiración de que los sindicatos negocien sin llegar a la huelga (77%) frente a sólo un 5% partidario de que se convoquen nuevas huelgas.
La idea de que las huelgas van a aumentar está mucho más extendida que en otoño de 1987: entonces pensaba así el 15% de los ocupados y hoy lo cree el 22% de los mismos.
Quienes más esperan un aumento de las huelgas no son los empresarios ni los obreros industriales, sino los cuadros superiores, directivos y altos funcionarios, por un lado, y los empleados...
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EL PAÍS, Los indicadores de opinión muestran entre la población ocupada la misma y masiva aspiración de que los sindicatos negocien sin llegar a la huelga (77%) frente a sólo un 5% partidario de que se convoquen nuevas huelgas.
La idea de que las huelgas van a aumentar está mucho más extendida que en otoño de 1987: entonces pensaba así el 15% de los ocupados y hoy lo cree el 22% de los mismos.
Quienes más esperan un aumento de las huelgas no son los empresarios ni los obreros industriales, sino los cuadros superiores, directivos y altos funcionarios, por un lado, y los empleados y cuadros medios, por otro.
Esto hace pensar que, como en años anteriores, el escenario huelguístico más probablemente visualizado está en la empresa y en los servicios públicos, donde se da la mayor concentración de personas activas que así lo prevén. Luego se puede decir que casi nadie desea un otoño caliente, pero donde más se espera es en el sector público.
La situación económica se sigue percibiendo mejor que hace un año, pero también que las diferencias entre los hogares económicamente más fuertes y los más débiles se siguen manteniendo; al menos en la valoración de los afectados.
En su conjunto, la valoración que se hace de la coyuntura económica nacional no es diferente a la de principios del verano. Poco significativo o ligerísimo incremento tanto de quienes la califican bien (17% frente a 15% en junio) como de quienes la califican mal (33% frente a 31% en junio).
Aumenta tanto la proporción de hogares cuya economía ha mejorado como la de los que ha ido a peor. El cambio es de tres puntos, equivalentes a un incremento del 23% en las economías que han mejorado y del 13% en las que han empeorado.
Sobre la evolución del paro y el empleo, se han recogido opiniones que permiten hacer comparaciones con la situación de hace un año por las mismas fechas. La conclusión general es que hay un mayor optimismo en el conjunto de la sociedad, pero sobre todo entre la población activa ocupada, y un mayor pesimismo que hace un año entre los parados.