Cartas al director

Té con mermelada

Estoy sumamente intrigada con el desayuno del señor Vicent (don Manuel). En su columna Moscardón, del 21 de agosto, asegura que toma por la mañana "té con mermelada". Yo conozco el té con leche, el té con limón o solo, con o sin azúcar, pero del té con mermelada no había oído hablar nunca. Sin duda se trata de una aportación mediterránea a la tradicional y aromática bebida inglesa, y la próxima vez que tome una taza de té estoy dispuesta a añadirle una buena cucharada de mermelada (¿de melocotón?, ¿de ciruela?, ¿de grosella?) para ver qué pasa, aunque, la verdad, no me fío de los result...

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Estoy sumamente intrigada con el desayuno del señor Vicent (don Manuel). En su columna Moscardón, del 21 de agosto, asegura que toma por la mañana "té con mermelada". Yo conozco el té con leche, el té con limón o solo, con o sin azúcar, pero del té con mermelada no había oído hablar nunca. Sin duda se trata de una aportación mediterránea a la tradicional y aromática bebida inglesa, y la próxima vez que tome una taza de té estoy dispuesta a añadirle una buena cucharada de mermelada (¿de melocotón?, ¿de ciruela?, ¿de grosella?) para ver qué pasa, aunque, la verdad, no me fío de los resultados.-

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