El dólar cotiza al alza ante un posible endurecimiento monetario

Los rumores de una posible subida de los tipos de interés norteamericanos para frenar las tensiones inflacionistas de ese país dispararon al alza la cotización del dólar.El camblo de la divisa norteamericana superó los 1,91 marcos por las expectativas de los inversores hacia un posible endurecimiento de la política monetaria norte americana. De poco sirvieron las ventas de dólares concertadas por los bancos centrales de EE UU y la República Federal de Alemania; al dólar le faltó poco para superar su máximo nivel de los últimos 19 meses, un máximo situado en 1,92 marcos.

Las intervencion...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Los rumores de una posible subida de los tipos de interés norteamericanos para frenar las tensiones inflacionistas de ese país dispararon al alza la cotización del dólar.El camblo de la divisa norteamericana superó los 1,91 marcos por las expectativas de los inversores hacia un posible endurecimiento de la política monetaria norte americana. De poco sirvieron las ventas de dólares concertadas por los bancos centrales de EE UU y la República Federal de Alemania; al dólar le faltó poco para superar su máximo nivel de los últimos 19 meses, un máximo situado en 1,92 marcos.

Las intervenciones de la FED y el Bundesbank sólo consiguieron frenar momentaneamente la tendencia ascendente pero fracasaron en su intento de eliminar el ímpetu de la subida. Atrás quedaron los efectos bajistas del déficit comercial en la cotización del dólar. El crecimiento de la economía norteamericana y, el probable despegue de la inflación atrae a los inversores extranjeros en busca de altas rentabilidades.

El problema, para los bancos centrales, estriba en decidir si sus intervenciones lograrán frenar las alzas o serán contrarestadas por las fuerzas del mercado. De momento, según Shearson Lehman Hutton, la Reserva Federal parece estar actuando por solidaridad con el Bundesbank y en cumplimineto de los acuerdos con el grupo de los siete, ya que, a corto plazo, un dólar fuerte podría infundir confianza en la economía norteamerica de cara a las elecciones presidenciales. A medio y largo plazo, sin embargo, podría poner en peligro los esfuerzos del G-7 para reducir los desequilibrios comerciales.

El Bundesbank sí tiene buenas razones para preocuparse por la debilidad de su moneda frente al dólar, pues de continuar esa tendencia la RFA podría registrar un aumento en su tasa de inflación.

El empuje alcista de la moneda norteamericana no se mantuvo con la misma fuerza en la bolsa. La apertura alcista de Wall Street se contuvo después de que el Dow Jones alcanzara el 2.032; el resto de la sesión fue a la baja, cerrando a 2.025,96 aún con una ganancia de 4,45 puntos.

Las bolsas europeas y japonesa tuvieron una sesión alcista como reflejo de la reacción de su homóloga norteamericana a la publicación de una cifra de déficit comercial bastante elevada. El índice Nikkei, en Tokio, subió 282,31 puntos al situarse, una vez más, por encima de la cota del 28.000. En todas las bolsas europeas abundaron las recuperaciones.

Archivado En