La comunidad propone una inversión de 130.000 millones para mejorar carreteras y ferrocarriles de cercanías

Eduardo Mangada, consejero de Política Territorial de la comunidad autónoma, presentó en la mañana de ayer la Estrategia de transportes en la región metropolitana de Madrid, un plan que requerirá una inversión de 130.000 millones de pesetas durante los próximos cuatro años. Dicho plan contempla la ampliación ole la red de metro, la creación de una nueva vía de circunvalación, la futura M-40, la potenciación de los ferrocarriles de cercanías y una serie de mejoras en la zona sur de la comunidad.

Los 130.000 millones de pesetas necesarios en "una primera valoración", como se dice en el do...

Eduardo Mangada, consejero de Política Territorial de la comunidad autónoma, presentó en la mañana de ayer la Estrategia de transportes en la región metropolitana de Madrid, un plan que requerirá una inversión de 130.000 millones de pesetas durante los próximos cuatro años. Dicho plan contempla la ampliación ole la red de metro, la creación de una nueva vía de circunvalación, la futura M-40, la potenciación de los ferrocarriles de cercanías y una serie de mejoras en la zona sur de la comunidad.

Los 130.000 millones de pesetas necesarios en "una primera valoración", como se dice en el documento elaborado por la Consejería de Política Territorial de la comunidad, se desglosan de la siguiente manera: 70.000 millones para red viaria, 35.000 para el metro, 20.000 para el ferrocarril y 5.000 para estaciones de intercambio. Según el plan, las actuaciones que se lleven a cabo deben ser financiadas por las correspondientes Administraciones en los próximos cuatro años.La propuesta de la comunidad se centra, fundamentalmente, en la ampliación de la red de metro, principal modo de conexión interna de la ciudad. Para ello se prevé completar la línea 6, posibilitando al máximo sus puntos de conexión con otros medios de transporte colectivo; la prolongación de la línea 1 hasta Sardinero / Sandi, con tres nuevas estaciones (Palomeras Norte, Alto del Arenal y Sandi), con un coste estimado de 3.800 millones de pesetas y cuya realización se iniciará en 1989, y la unión de las líneas 10 (Suroeste), 7 (Este) y 8 (Norte), lo que permitirá mejorar su explotación y el acceso de la población a los centros de actividad y empleo.

La nueva M-40

La actuación prevista en la red viaria contempla el cierre del tercer cinturón de la ciudad (M-30) y la creación de un cuarto, la M-40, así como la construcción de nuevas variantes en las autovías de La Coruña y Andalucía. Asimismo establece una serie de líneas de cercanías que mejoren los accesos a Madrid por vía ferrea en conexión con las redes de metro y de autobuses urbanos.Eduardo Mangada subrayó la prioridad de mejorar las conexiones de Madrid con el resto de las ciudades españolas y con las capitales europeas por el compromiso de haber sido nombrada capital cultural de Europa en 1992, y la necesidad de contar con una política integradora y global del transporte público y privado.

El consejero de Política Territorial reconoció el grave problema de transportes que sufre la comunidad en los últimos tiempos y defendió que la solución radica en la mejora del transporte colectivo, como el metro, "fáctor racionalizador de cualquier política de transportes para Madrid", y en una adecuación social y psicológica de los ciudadanos que "permita restringir el uso del vehículo privado".

Mangada aseguró que siempre existirá un desfase entre la capacidad de la Administración para acometer obras de infraestructura y el crecimiento del parque de vehículos o de la demanda de uso de los transportes colectivos.

También anunció que el nuevo contrato-programa de metro "está en su fase final" y que sólo restan discrepancias de tipo técnico entre el Ministerio de Hacienda y la comunidad.

Apoyos al plan

El plan ha sido elaborado y debatido a lo largo de los últimos seis meses con expertos del Ministerio de Obras Públicas y del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, del Ayuntamiento de Madrid y de la Cámara de Comercio e Industria, así como con responsables de empresas públicas y representantes de colegios profesionales, así como con el resto de partidos políticos representados en las instituciones madrileñas.Eduardo Mangada pidió que este apoyo "se transforme en actuaciones y convenios de ínversión" y solicitó el favor o la crífiea de la opinión pública como acicate del proyecto.