Un lotero se suicida en Málaga tras vender en exceso participaciones del 'gordo'

Joaquín Recio Subires, vendedor ambulante de lotería de la localidad malagueña de Álora, fue encontrado muerto el pasado domingo por la mañana, ahorcado en un olivo de la finca San José, próxima al pueblo. Recio Subires se suicidó, según todos los indicios, porque vendió más participaciones que décimos tenía en su poder del número 86.949, que fue premiado con el gordo en el sorteo extraordinario de Lotería del Día del Padre.El vendedor ambulante tenía 40 años de edad y era padre de cinco hijos. En el pueblo se le conocía por el apodo de el Orejón. Todos los vecinos coincid...

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Joaquín Recio Subires, vendedor ambulante de lotería de la localidad malagueña de Álora, fue encontrado muerto el pasado domingo por la mañana, ahorcado en un olivo de la finca San José, próxima al pueblo. Recio Subires se suicidó, según todos los indicios, porque vendió más participaciones que décimos tenía en su poder del número 86.949, que fue premiado con el gordo en el sorteo extraordinario de Lotería del Día del Padre.El vendedor ambulante tenía 40 años de edad y era padre de cinco hijos. En el pueblo se le conocía por el apodo de el Orejón. Todos los vecinos coinciden en que vivía en condiciones de extrema Pobreza. Durante los meses de invierno se dedicaba a la venta de espárragos, práctica que alternaba con rifas de todo tipo de cosas y algún que otro animal, como un chivo que rifó recientemente. Joaquín Recio hacía también algunos trabajos esporádicos, que le servían para reunir los jornales necesarios para tener derecho al subsidio agrario.

Además de estas dedicaciones eventuales, Joaquín Recio adquiría frecuentemente un décimo del que hacía y vendía participaciones, aun cuando no estaba registrado como vendedor.

Cuando fue encontrado muerto se le halló en su bolsillo un décimo del número 86.949, que fue premiado con el gordo en el sorteo extraordinario del pasado sábado. El vendedor hizo de este décimo más participaciones de las permitidas, según fuentes próximas al juzgado de distrito que interviene en el caso. Asimismo, en su vivienda se encontró un talonario del que faltaban algunas participaciones. Aún no se ha determinado el número total de ellas que vendió, aunque sí que las distribuyó por el mismo pueblo y caseríos cercanos.

El décimo premiado ha sido depositado en una entidad bancaria de la localidad. Según la propietaria de la administración de loterías número 1 de Álora, Rafaela Zamudio, el dinero será distribuido entre las personas que adquirieron las participaciones, "aunque seguramente les tocará menos de lo que les correspondería". El décimo está premiado con ocho millones de pesetas.

En Álora se vendieron dos billetes del número agraciado con el primer premio.

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