FÚTBOL / PRIMERA DIVISIÓN

El Sevilla sólo pudo empatar ante un Zaragoza defensivo

Si en el fútbol se castigasen las faltas igual que en el baloncesto, al Zaragoza le hubiese faltado ayer más de un banquillo de suplentes. El juego desarrollado por los maños fue eficaz por el punto conseguido, pero desesperante para el espectador. El Sevilla sólo pudo empatar ante un rival que le ganó la partida en el centro del campo, con una cobertura superdefensiva y que utilizó acciones antirreglamentarias cuando se vió desbordado en la zona media.El Sevilla no jugó bien. Sólo las faltas lanzadas por Bengoechea crearon peligró a Cedrún. El Zaragoza ralentizó el partido a base de faltas, c...

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Si en el fútbol se castigasen las faltas igual que en el baloncesto, al Zaragoza le hubiese faltado ayer más de un banquillo de suplentes. El juego desarrollado por los maños fue eficaz por el punto conseguido, pero desesperante para el espectador. El Sevilla sólo pudo empatar ante un rival que le ganó la partida en el centro del campo, con una cobertura superdefensiva y que utilizó acciones antirreglamentarias cuando se vió desbordado en la zona media.El Sevilla no jugó bien. Sólo las faltas lanzadas por Bengoechea crearon peligró a Cedrún. El Zaragoza ralentizó el partido a base de faltas, cortó el ritmo a su rival, y consiguió serenar su juego en medio campo. Pardeza fue el jugador clave del encuentro. Siempre activo, provocó a la defensa y al público, logré el gol de su equipo, y dejó secas las gargantas de los aficionados que no pararon de gritarle.

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