Nueva derrota del Barcelona en la Copa de Europa

ENVIADO ESPECIALEl Barcelona se hundió anoche como una piedra lanzada al oceáno. La lógica se ahogó en un mar de despropósitos. Lo que parecía una quimera, incluso por el desarrollo del partido hasta bien entrada la segunda mitad, se hizo realidad. Patética realidad que el potente tanque azulgrana se viera inutilizado por un pequeño utilitario. Ahora, deberá estar a la expectativa de lo que haga el Maceabi para entrar en las semifinales de Gante.

El Barcelona sólo tenía que superar el peligro de su propia desmotivación. El Den Bosch, privado de un americano, Thompson, con un pivot lesio...

ENVIADO ESPECIALEl Barcelona se hundió anoche como una piedra lanzada al oceáno. La lógica se ahogó en un mar de despropósitos. Lo que parecía una quimera, incluso por el desarrollo del partido hasta bien entrada la segunda mitad, se hizo realidad. Patética realidad que el potente tanque azulgrana se viera inutilizado por un pequeño utilitario. Ahora, deberá estar a la expectativa de lo que haga el Maceabi para entrar en las semifinales de Gante.

El Barcelona sólo tenía que superar el peligro de su propia desmotivación. El Den Bosch, privado de un americano, Thompson, con un pivot lesionado, Pieterse, descartado ya de la lucha para las semifinales , apoyado sólo por 1.000 personas, no podía ganar al Barcelona. Eso, al menos, estaba en los escritos. Pero de una diferencia a favor de 11 puntos, 54-65, en el mínuto 26, el empate llegó a cinco minutos y medio del final (79-79), con desconcierto total ante el correcalles en que se convirtió el partido. El Barcelona no supo luchar contra sí mismo, que en definitiva era de lo único que se trataba.