Ruiz-Mateos sigue encarcelado en Lérida, a la espera de su traslado a Madrid

El juez de Delitos Monetarios, Rodolfo Soto Vázquez, ordenó a primera hora de la tarde de ayer el traslado a Madrid de José María Ruiz-Mateos, encarcelado en la prisión Lérida 1 desde la madrugada de ayer. El ex propietario de Rumasa fue detenido en la noche del jueves cuando cenaba en un hotel de las afueras de la Seu d'Urgell (Lérida). La orden de traslado a la prisión de Carabanchel fue cursada sin carácter de urgencia al Departamento de Justicia de la Generalitat, que decidirá el día en que se efectuara el traslado. Fuentes judiciales indicaron que el detenido podría permanecer en Lérida 1...

El juez de Delitos Monetarios, Rodolfo Soto Vázquez, ordenó a primera hora de la tarde de ayer el traslado a Madrid de José María Ruiz-Mateos, encarcelado en la prisión Lérida 1 desde la madrugada de ayer. El ex propietario de Rumasa fue detenido en la noche del jueves cuando cenaba en un hotel de las afueras de la Seu d'Urgell (Lérida). La orden de traslado a la prisión de Carabanchel fue cursada sin carácter de urgencia al Departamento de Justicia de la Generalitat, que decidirá el día en que se efectuara el traslado. Fuentes judiciales indicaron que el detenido podría permanecer en Lérida 1 hasta principios de la próxima semana.Ruiz-Mateos fue detenido por dos guardias civiles de paisano cuando cenaba en el motel Castell, de la Seu, con su esposa Teresa Rivero y tres de sus hijos. La familia Ruiz-Mateos había visitado por la mañana el santuario de Nuria, en el Pirineo de Gerona, y tenía previsto visitar el de la Virgen de Begoña, en Bilbao.

Fuentes policiales señalaron a este periódico que la detención se produjo tras una llamada anónima efectuada al cuartel de la Guardia Civil de la Seu en la que una voz masculina informaba de la presencia de Ruiz-Mateos en el hotel en el que fue detenido. Esta circunstancia no excluye, según otras versiones, que los movimientos de la familia Ruiz-Mateos fueran vigilados de cerca desde su salida de Madrid por la Guardia Civil. Una vez en el juzgado de la Seu, el ex presidente de Rumasa prestó declaración ante el titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Lérida, Juan Pérez Fortit, quien, tras recibir instrucciones del juez Soto, decretó la prisión incondicional. A las 4.30 horas de ayer, el empresario ingresó en Lérida 1 y pasó la noche en la enfermería.

Precisamente, el mismo día de la detención, el juez Soto decretaba una orden de busca y captura y dictaba auto de prisión incondicional contra el empresario, que había retirado el aval que depositó para obtener la libertad provisional. El lunes tenía que presentarse ante el juez, pero el domingo inició unas vacaciones tras comunicárselo por carta al juez Soto, a quien anunció su intención de no comparecer ante él hasta el día del juicio.