Los beneficios del Banco de Crédito Local ascendieron a 7.038 millones
Los resultados del Banco de Crédito Local en el pasado ejercicio alcanzaron la cifra de 7.038 millones de pesetas, después de realizar unas provisiones de 2.649 inillones de pesetas, según los datos hechos públicos ayer por el presidente de la entidad, Andrés García de la Riva. El banco público, que en 1986 moderó su ritmo de crecimiento de ejercicios anteriores, aumentó sus créditos a las corporaciones locales en 60.000 millones de pesetas, superando por primera vez el medio billón de pesetas en créditos vigentes.
La morosidad de los créditos concedidos por el BCL "es mínima", segú...
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Los resultados del Banco de Crédito Local en el pasado ejercicio alcanzaron la cifra de 7.038 millones de pesetas, después de realizar unas provisiones de 2.649 inillones de pesetas, según los datos hechos públicos ayer por el presidente de la entidad, Andrés García de la Riva. El banco público, que en 1986 moderó su ritmo de crecimiento de ejercicios anteriores, aumentó sus créditos a las corporaciones locales en 60.000 millones de pesetas, superando por primera vez el medio billón de pesetas en créditos vigentes.
La morosidad de los créditos concedidos por el BCL "es mínima", según declaró el presidente de la entidad, porque "junto a las concesiones de créditos apoyamos a las entidades públicas a encontrar vías de aumentos de sus ingresos que permitan recuperar los créditos". A pesar de ello el banco ha realizado provisiones por valor de 2.649 millones de pesetas, de las que la mitad corresponden a las exigencias legales de provisiones para insolvencias y 800 millones tienen corno objeto cubrir los complementos de pensiones en el caso de que los tribunales fallaran en el sentido de que la entidad tiene que completar las pensiones de los jubilados.
El BCL, dentro de su política de frenar el crecimiento, ha reducido en los dos últimos ejercicios su tesorería y su cartera de pagarés del Tesoro y de empresas públicas para no necesitar acudir al mercado en busca de recursos ajenos, poder seguir manteniendo sus niveles de actividad crediticia.