Un policia muerto y 12 heridos al estallar un coche bomba en Barcelona
La explosión de un coche bomba, ocurrida anoche frente al cuartel de la Policía Nacional situado en la plaza de España de Barcelona, provocó la muerte de un policía nacional y 12 heridos, entre ellos tres agentes. Otras tres personas que sufren lesiones de pronóstico grave pertenecen a una misma familia. Se trata de dos hermanos y la mujer de uno de ellos. La policía sospecha de ETA.El estallido se produjo a las diez de la noche y destrozó una furgoneta y varios vehículos, además de abrir un gran cráter en el asfalto. El ruido pudo oírse en un radio de varios kilómetros. Restos de la explosión...
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La explosión de un coche bomba, ocurrida anoche frente al cuartel de la Policía Nacional situado en la plaza de España de Barcelona, provocó la muerte de un policía nacional y 12 heridos, entre ellos tres agentes. Otras tres personas que sufren lesiones de pronóstico grave pertenecen a una misma familia. Se trata de dos hermanos y la mujer de uno de ellos. La policía sospecha de ETA.El estallido se produjo a las diez de la noche y destrozó una furgoneta y varios vehículos, además de abrir un gran cráter en el asfalto. El ruido pudo oírse en un radio de varios kilómetros. Restos de la explosión fueron catapultados a más de 200 metros del lugar del atentado. La bomba no estalló frente a la puerta del acuartelamiento, sino a unos metros, junto a unas dependencias inu nicipales contiguas.
El fallecido es el policía na -cional Ángel González Pozo que estaba de guardia. En el hospital Clínico ingresaron seis personas. En la residencia de Bellvitge fueron atendidos también cuatro heridos, uno de ellos grave. Otra persona in gresó en estado leve en la residencia municipal de urgencias de Perecamps, y una más, en el hospital de la Cruz Roja de l?Hospitalet.
El atentado se produce tres días antes de que el Comité Olímpico Internacional (COI) decida la sede de los Juegos Olímpicos de 1992, a los que Barcelona es candidata. El presidente de la Generalitat, Jordi Pujol, que acudió al lugar de los hechos, se negó a vincular el atentado con la candidatura olímpica de la ciudad. Afirmó que se trataba de un "terrorismo importado", aunque admitió que podían "existir bases logísticas locales".
Pujol se mantuvo en contacto telefónico con el alcalde de Barcelona, Pasqual Maragall, que se encuentra en Lausana (Suiza) para presentar la candidatura ante el COI. Maragall se mostró preocupado por el atentado.
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