FÚTBOL/ PRIMERA DIVISIÓN

Dominio infructuoso de Las Palmas

Los postes y el colegiado, con sus acciones, fueron ayer los aliados del Betis, en su encuentro con la Unión Deportiva Las Palmas. Un partido que, a fin de cuentas, sólo cobró emoción en los minutos finales, con un conjunto, el amarillo, totalmente volcado sobre la meta rival y cuyos ataques se tropezaron en cinco ocasiones con la madera y en otras tantas con las acciones defensivas del cuadro verdiblanco o con las manos del anoche inseguro Cervantes.El primer tiempo pudiera, incluso, obviarse, por cuanto tanto uno como otro equipos aburrieron sobremanera a la parroquia, que acudió en buen núm...

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Los postes y el colegiado, con sus acciones, fueron ayer los aliados del Betis, en su encuentro con la Unión Deportiva Las Palmas. Un partido que, a fin de cuentas, sólo cobró emoción en los minutos finales, con un conjunto, el amarillo, totalmente volcado sobre la meta rival y cuyos ataques se tropezaron en cinco ocasiones con la madera y en otras tantas con las acciones defensivas del cuadro verdiblanco o con las manos del anoche inseguro Cervantes.El primer tiempo pudiera, incluso, obviarse, por cuanto tanto uno como otro equipos aburrieron sobremanera a la parroquia, que acudió en buen número al Insular a pesar de los malos resultados cosechados en los últimos encuentros por el conjunto amarillo.

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Fueron unos primeros 45 minutos de forcejeo en el centro del campo y en los que las porterías apenas si pasaron por momentos de agobio, salvedad hecha de los últimos Cinco minutos, cuando los amarillos, pareciendo despertar de su letargo, cosecharon dos o tres acciones que pudieron finalizar, en gol.

La segunda parte, con los cambios introducidos por Kovacs, el de Javier por Saavedra incomprensible, los jugadores amarillos se fueron más adelante, buscando desequilibrar a su favor la balanza en el marcador, y contaron con bastantes ocasiones, pero el esférico no cruzó la divisoria del arco verdiblanco.

El Betis, que se defendió bastante bien, contragolpeó con cierto peligro, pero sus jugadores se mostraron romos a la hora de llegar a las inmediaciones de los dominios de Pérez y, además, se preocupaban más de perder tiempo de forma deliberada -sin que el colegiado les llamase la atención por ello- que de sacar partido de las imprecisiones de la retaguardia y el centro del zampo amarillos.

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