Muñoz intenta conquistar a los mexicanos para frenar el ambiente favorable a Brasil

ENVIADO ESPECIAL, Miguel Muñoz, seleccionador español de fútbol, descubrió ayer una de sus escasas preocupaciones en estos momentos: el ambiente que habrá el próximo 1 de junio en el estadio Jalisco, de Guadalajara, cuando España se enfrente a Brasil en el primer partido del grupo D. "Me preocupa que nuestra selección no sea acogida allí con el mismo cariño y afecto que lo será Brasil", comentó ayer Todos los indicios señalan qué los mexicanos estarán primero con su selección y después con Brasil. La expedición española está tratando de ganarse a la Prensa mexicana, sus dirigentes y su afición...

ENVIADO ESPECIAL, Miguel Muñoz, seleccionador español de fútbol, descubrió ayer una de sus escasas preocupaciones en estos momentos: el ambiente que habrá el próximo 1 de junio en el estadio Jalisco, de Guadalajara, cuando España se enfrente a Brasil en el primer partido del grupo D. "Me preocupa que nuestra selección no sea acogida allí con el mismo cariño y afecto que lo será Brasil", comentó ayer Todos los indicios señalan qué los mexicanos estarán primero con su selección y después con Brasil. La expedición española está tratando de ganarse a la Prensa mexicana, sus dirigentes y su afición.

Los periodistas mexicanos acudieron ayer por vez primera a la conferencia de prensa de Muñoz. Intentaron arrancarle el equipo titular, su sistema de juego, sus secretos, pero Muñoz se deshizo de ellos con una de sus tradicionales bromas: "Sí, para que después se lo cuenten a los brasileños". Pero, sin embargo, consiguieron algo que no habían podido lograr, 24 horas antes, los españoles: que un jugador le acompañase la conferencia del mediodía. Se trata de un gesto para tener buena prensa.Un equipo con raza

"A nosotros", comentó Muñoz, nos gustaría que el público de Guadalajara nos recibiera como a Brasil. Ni más ni menos. Sólo pido que estemos al 50%. Nuestro fútbol se lo merece y les puedo asegurar que no les defraudaremos". Da la sensación de que Muñoz empieza a medir cuidadosamente sus fuerzas y, aunque no lo diga, sabe que en un encuentro tan igualado. -Brasil no parece el campeón de otras épocas- la colaboración del público puede decantar la balanza. "No me creo lo de las bajas y, además, a veces tantos lesionados te arreglan el equipo"

La selección está ya lanzada. Los entrenamientos son duros y se trabaja en un ambiente inmejorable. Alguien le preguntó a Muñoz cómo era el fútbol de su conjunto. "Es un equipo que siempre tiene ilusión por ganar", comentó Muñoz, "un equipo que nunca pierde la garra; un equipo que derrocha fuerza, que no se resigna a perder. Es el reflejo del tempera mento español, de nuestra raza. Una cosa está clara: no nos en tregamos nunca".

Muñoz comunicó que España jugará definitivamente cuatro encuentros amistosos. El día 20 y 21, en Guadalajara, contra el titular y el Atlas; el 24, en Ciudad de México, frente al Atlantic, o en Tlaxcala, ante el Puebla, y el 25, en Tlaxcala, con la selección juvenil de México.

Mientras Ablanedo, el portero del Spórting de Gijón y el menos goleado en el último campeonato de Liga, se recupera de una afección gripal, la selección coge carrerilla para ponerse a tono con la altura de México y la de la Copa del Mundo. Técnicos, médicos y masajistas viven con el corazón encogido durante los entrenamientos. "¡Ojo a los plantillazos!", gritó ayer Muñoz. Y es que, después de lograr un equipo compacto, eficaz, preocupa es que todos lleguen en condiciones al 1 de junio. Y es que también, como decía recientemente, Muñoz algún día dirá a sus jugadores que "pueden ser campeones".