El Banco Urquijo registrará este año entre 1.500 y 2.000 millones de beneficio

El Banco Urquijo-Unión registrará este año unos resultados positivos comprendidos entre 1.500 y 2.000 millones de pesetas, según manifestó ayer el presidente del grupo Hispano Americano, Claudio Boada, quien señaló que el banco es "absolutamente invendible, por el momento", a causa del exceso de plantilla y de su gravosa participación en empresas industriales. "Pero es que la posibilidad de vender el Urquijo-Unión la he complicado yo todavía más", señaló Boada, "porque el Urquijo será a partir de este año un banco rentable, y por tanto resultará un banco caro. Así que, definitivamente, el Urqu...

El Banco Urquijo-Unión registrará este año unos resultados positivos comprendidos entre 1.500 y 2.000 millones de pesetas, según manifestó ayer el presidente del grupo Hispano Americano, Claudio Boada, quien señaló que el banco es "absolutamente invendible, por el momento", a causa del exceso de plantilla y de su gravosa participación en empresas industriales. "Pero es que la posibilidad de vender el Urquijo-Unión la he complicado yo todavía más", señaló Boada, "porque el Urquijo será a partir de este año un banco rentable, y por tanto resultará un banco caro. Así que, definitivamente, el Urquijo no es un banco vendible".Hablando en una reunión con periodistas económicos, Boada mostró su confianza en que el Hispano "se recuperará con toda seguridad", señalando que durante el primer cuatrimestre ha doblado sus resultados con respecto al mismo período del año anterior. El presidente del Hispano adelantó que es probable que el porcentaje se mantenga durante todo el ejercicio, aunque "opino que el doble de poco sigue siendo poco".

Con respecto a los cambios en el consejo de Administración, Claudio Boada anunció que éstos continuarán, aunque después de tomarse un respiro tras la reciente revolución que ha llevado al consejo a empresarios como Rafael del Pino, Juan Lladró o Fernando de Assúa. Boada opina que la eficacia de los consejos depende de la diversificación de sus miembros, asegurando que en el del Hispano llegarán a sentarse no sólo empresarios o gerentes destacados, sino "gente de categoría profesional probada en otros campos, como la política, las letras o las artes".

Hablando con la Claridad que le caracteriza ("acepté la presidencia del Hispano porque me la ofreció su consejo y porque me dio la gana"), Boada, para quien la crisis de su banco fue una crisis gerencial, aseguró que la clave de la recuperación del Hispano radica en los cambios introducidos en dicha gerencia ("se ha formado un excelente equipo directivo, donde cada uno no va por su lado") y en la rentabilización de la red comercial, compuesta por cerca de 1.500 sucursales, adelantando que este año ha cerrado ya 10 oficinas en distintos puntos del país.