De centro y con vocación de parado coligado

Las ponencias y resoluciones que Alianza Popular ha aprobado en su VII congreso, que serán ley de obligado cumplimiento para militantes y dirigentes durante los próximos tres años, hasta la celebración de la siguiente asamblea, han modificado sensiblemente la doctrina ideológica del partido y espectacularmente la organización y vida interna. El sistema de elección de los miembros de la ejecutiva nacional por el procedimiento de listas abiertas supone toda una novedad organizativa. AP muestra con claridad su vocación de federarse y coligarse en aras de su objetivo fundamental: alcanzar e...

Las ponencias y resoluciones que Alianza Popular ha aprobado en su VII congreso, que serán ley de obligado cumplimiento para militantes y dirigentes durante los próximos tres años, hasta la celebración de la siguiente asamblea, han modificado sensiblemente la doctrina ideológica del partido y espectacularmente la organización y vida interna. El sistema de elección de los miembros de la ejecutiva nacional por el procedimiento de listas abiertas supone toda una novedad organizativa. AP muestra con claridad su vocación de federarse y coligarse en aras de su objetivo fundamental: alcanzar el Gobierno de la nación en 1986.La ponencia política ha sufrido diversos avatares desde que se conoció el primer borrador, ideado por Miguel Herrero y Rodríguez de Miñón, hasta que el sábado resultó aprobada por unanimidad, entre aclamaciones a su autor. Las referencias de Herrero hacia los partidos coligados, a los que invitaba sutilmente a integrarse en AP, desaparecieron absolutamente de la redacción final. "Alianza Popular es el principal partido de centro derecha que aspira a cubrir por sí solo, no excluyendo sino integrando, sin perjuicios pero sin capitulaciones, el espacio de la moderación", es la única referencia cautelosa que permanece en la aprobada ponencia.

Todo hace indicar que Manuel Fraga, presidente de AP, es el máximo impulsor y mantenedor de la coalición de su partido con el PDP y el PL, a pesar de las reticencias que ésta despierta. Numerosos dirigentes provinciales no se recatan en afirmar que AP por sí sola obtendría los mismos resultados que los que consigue con sus dos so cios, con la diferencia de que los militantes de AP no tendrían que ceder puestos en las listas a miembros de los otros partidos.

"Alianza Popular reitera su de seo de colaborar, con todos los medios a su alcance, a que se forme una mayoría eficaz y estable, abierta a todos los que quieran contribuir a que España se arregle", fue una de las muchas llamadas a la coalición que ayer realizó Fraga en la clausura de su congreso, al tiempo que elogiaba a los partidos ya coligados y a sus líderes Óscar Alzaga (PDP) y José Antonio Segurado (PL). Pero su vocación de caminar con otras fuerzas políticas queda plasmada en el artículo cuarto de la ponencia de estatutos: "Alianza Popular, para la consecución de sus fines, propiciará federaciones y coaliciones con otras fuerzas políticas que asuman el proyecto de formación de una opción política liberal-conservadora para el gobierno de las instituciones de la nación". Este congreso ha reiterado la ideología liberal-conservadora del partido, así como su aspiración de ocupar el centro político.

El partido prohíbe expresamente la existencia de corrientes de opinión en su seno y otorga a las organizaciones provinciales una sensible autonomía con respecto al aparato central de Madrid. La creación de tres secretarios generales adjuntos, que apoyarán al secretario general en sus funciones, es otro aspecto novedoso que no pocos han interpretado como un claro intento de restar competencias a la secretaría que ostenta Jorge Verstrytige.