Sancho Dronda anuncia el cierre de Agrar

El director general de la Caja de Ahorros de Zaragoza, Aragón y Rioja (CAZAR), José Joaquín Sancho Dronda, anunció ayer el cierre de Agrar (Actividades Agrícolas Aragonesas), empresa participada al 100% y en la que dicha entidad financiera había acumulado riesgos por valor de 8.670 millones de pesetas, lo que motivó que el Banco de España abriera un expediente administrativo.Sancho Dronda señaló que las cifras del riesgo que se han manejado "son inexactas". Señaló también que "no hay agujero en Agrar, pero puede que lo haya cuando la liquidemos y entonces lo sabremos".

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El director general de la Caja de Ahorros de Zaragoza, Aragón y Rioja (CAZAR), José Joaquín Sancho Dronda, anunció ayer el cierre de Agrar (Actividades Agrícolas Aragonesas), empresa participada al 100% y en la que dicha entidad financiera había acumulado riesgos por valor de 8.670 millones de pesetas, lo que motivó que el Banco de España abriera un expediente administrativo.Sancho Dronda señaló que las cifras del riesgo que se han manejado "son inexactas". Señaló también que "no hay agujero en Agrar, pero puede que lo haya cuando la liquidemos y entonces lo sabremos".

El director de la CAZAR rompió ayer su silencio sobre Agrar en unas declaraciones realizadas al centro de TVE en Aragón. Sancho Dronda negó que la caja no destinara en 1984 beneficios a la obra social: "La obra social tiene un presupuesto de 500 millones de pesetas que hemos cubierto con aportaciones de la caja".

EL PAIS publicó el 2 de noviembre que la CAZAR no destinó parte alguna de los beneficios de 1984, que ascendían a 2.572 millones de pesetas, para la obra benéfico-social). La asamblea acordó distribuir este excedente en dos partidas: 600 millones para previsión de impuestos y el resto, 1.975 millones, para previsión de insolvencias. La propuesta inicial, recogida en la memoria, destinaba 1.778 millones para insolvencia, 600 para impuestos y 197 para la obra social. Para evitar disminuir la trascendencia de estos hechos, la entidad optó por autosecuestrar la memoria.

Sancho Dronda aseguró que la memoria pasó por la asamblea, estuvo expuesta durante 15 días y se repartió a los directivos, al Gobierno autónomo y a los impositores que la solicitaron.

El director general de la CAZAR señaló que "un empleado desleal ha sacado a la luz pública la lista de empresas morosas que, además, es incompleta". Añadió que morosos "no quiere decir que sean créditos fallidos".

Los jefes de departamento de la CAZAR han recibido una carta en la que se dice que existe una campaña contra la institución. Un portavoz de UGT señaló que el cierre de Agrar supondrá la pérdida de más de 90 puestos de trabajo y que el director de la empresa, Pedro de Werietz, yerno de Sancho Dronda, "dilapidó el patrimonio".

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