524 muertos en Japón al estrellarse un Boeing 747 por fallo de una puerta

Un Boeing 747 de la compañía Japan Air Lines (JAL) se estrelló en la tarde de ayer (hora japonesa, por la mañana en España) en la falda del monte Okura, a 72 kilómetros de la capital japonesa, con 524 personas a bordo. No hay supervivientes. El accidente se produjo después de que el piloto comunicara por radio que había perdido el control del aparato en medio de una fuerte tormenta. Al parecer, problemas en la última puerta del lateral derecho del aparato provocaron una súbita descompresión que le hizo perder altura hasta estrellarse varios minutos después.

El avión, que cubría la línea...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Un Boeing 747 de la compañía Japan Air Lines (JAL) se estrelló en la tarde de ayer (hora japonesa, por la mañana en España) en la falda del monte Okura, a 72 kilómetros de la capital japonesa, con 524 personas a bordo. No hay supervivientes. El accidente se produjo después de que el piloto comunicara por radio que había perdido el control del aparato en medio de una fuerte tormenta. Al parecer, problemas en la última puerta del lateral derecho del aparato provocaron una súbita descompresión que le hizo perder altura hasta estrellarse varios minutos después.

El avión, que cubría la línea Tokio-Osaka, iba completamente lleno, con 15 tripulantes y 509 pasajeros, en su mayoría hombres de negocios y trabajadores que se dirigían a Osaka para las fiestas de verano japonesas de Obon. Entre los pasajeros se encontraban 12 niños y 21 extranjeros, cuyas nacionalidades no habían sido facilitadas a última hora de ayer por la JAL.El piloto alertó a los controladores aéreos: "La puerta trasera derecha del avión está destruida. Vamos a hacer un aterrizaje de emergencia". Más tarde afirmó: "Hemos perdido el control". Luego el aparato desapareció de las pantallas de radar del centro de control de Tokorozawa.

Pasadas las 10 de la noche (hora local), un helicóptero del Ejército japonés encontró los restos del aparato a unos 2.000 metros, en el monte Okura, en la provincia montañosa de Nagano. Según informaciones de este helicóptero, los restos del avión pueden observarse en un área de cinco kilómetros a la redonda, muchos de ellos incendiados.

Miembros de la policía, el Ejército y los bomberos intentaban esta madrugada llegar al lugar del suceso, pero lo intrincado de la zona y las dificultades climatológicas -niebla y lluvia- impedían el acceso a los restos del avión siniestrado. A última hora, incluso tuvo que suspenderse la búsqueda aérea.

El accidente de este avión de la JAL es el peor desastre aéreo de un solo aeroplano en la historia de la aviación. El anterior récord lo poseía el accidente de un DC-10 turco que se estrelló en París en 1974, con un total de 346 muertos. Casualmente, el origen de la catástrofe en ambos casos parece ser similar.

Archivado En