Los detalles

El tándem Gordillo-Butragueño, en la segunda parte; el cambio de posición del extremo zurdo escocés, Cooper, también tras el descanso, y las intervenciones de los dos guardametas fueron los detalles más significativos respecto al rendimiento personal de los que ayer contendieron en Sevilla. El bético realizó sus clásicas internadas por la izquierda y le hizo un túnel a Souness poco antes de que éste le hiciese falta, ya venciendo España y a 13 minutos del final.El portero escocés, Leighton, tuvo que emplearse en más ocasiones y con mayor peligro que su colega, Arconada. La primera, a ca...

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El tándem Gordillo-Butragueño, en la segunda parte; el cambio de posición del extremo zurdo escocés, Cooper, también tras el descanso, y las intervenciones de los dos guardametas fueron los detalles más significativos respecto al rendimiento personal de los que ayer contendieron en Sevilla. El bético realizó sus clásicas internadas por la izquierda y le hizo un túnel a Souness poco antes de que éste le hiciese falta, ya venciendo España y a 13 minutos del final.El portero escocés, Leighton, tuvo que emplearse en más ocasiones y con mayor peligro que su colega, Arconada. La primera, a cargo de Goicoetxea, en el minuto siete, tras jugada de Gordillo por su banda. Las otras, de Gordillo de nuevo, en el 17, y Señor, en el 78. Los tres fueron potentes disparos por alto que el largo cancerbero desvió a córner. Tuvo que detener otro tiro de Gallego por bajo y algunos de menor entidad, como uno de Clos con la pierna cambiada. Arconada detuvo el primer disparo de la selección escocesa, obra de McStay, en el minuto 50. Pero su mejor intervención fue el magnífico desvío a córner de una falta lanzada desde la izquierda por Cooper. Arconada voló de palo a palo y no se dejó engañar por Johnston, que saltó al primer ángulo. Sin embargo, no intervino en las dos más claras ocasiones escocesas, ambas tras jugadas de Cooper por la izquierda. La primera ocurrió en el minuto 70 y la segunda en el 80, ésta última marrada porque pegó en Archibald.

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El cambio de posición de Cooper fue precisamente la modificación táctica más importante del cuadro escocés. Cooper estuvo bien sujeto por Camacho en la primera mitad, cuando se prodigó por la derecha. Pero en la segunda, por su banda, quedó libre de marcaje y aumentó su peligrosidad.

Gordillo, el pundonoroso astro del Betis, no se dejó impresionar por su propia dolencia, que precisó la atención del masajista. Realizó sus típicas penetraciones por la izquierda hasta el banderín para luego centrar al segundo palo o al punto de penalti. En la segunda mitad brillaron con luz propia las jugadas entre Gordillo y Butragueño. Éste descendió al círculo central e incluso a la defensa a recoger balones. De hecho, el gol nació de un balón que recogió el delantero centro a la izquierda de la zaga española. Una copia exacta de esa jugada se produjo en el minuto 78, pero esta vez fue por la izquierda del ataque y con Gordillo.

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