La 'banquera del pueblo' portuguesa pagó los intereses

Branca dos Santos, la banquera del pueblo, cumplió la promesa hecha hace una semana: en su oficina central de Lisboa, los amigos que le prestaron dinero en junio y julio del año en curso recibieron ayer los intereses de los dos meses vencidos, a razón del 10% mensual.

No hubo esta vez escenas de histeria y empujones, ni tampoco aplausos a la llegada de la vieja señora. Los primeros clientes confirmaron al salir que "doña Branca paga", y la buena noticia disipó definitivamente los temores que aún existían.

Restablecido el clima de confianza y optimismo, también se desvaneció ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Branca dos Santos, la banquera del pueblo, cumplió la promesa hecha hace una semana: en su oficina central de Lisboa, los amigos que le prestaron dinero en junio y julio del año en curso recibieron ayer los intereses de los dos meses vencidos, a razón del 10% mensual.

No hubo esta vez escenas de histeria y empujones, ni tampoco aplausos a la llegada de la vieja señora. Los primeros clientes confirmaron al salir que "doña Branca paga", y la buena noticia disipó definitivamente los temores que aún existían.

Restablecido el clima de confianza y optimismo, también se desvaneció la hostilidad hacia la Prensa. Branca dos Santos declaró que "no tenía nada contra los periodistas", pero que precisaba de "mucha tranquilidad, porque necesitaba trabajar y hay mucho que hacer".

El mutismo de las autoridades portuguesas acerca del caso doña Branca se mantiene. El director de la Policía Judicial, Carlos Peixoto, confirmó a este corresponsal la existencia de varias querellas relacionadas con "la organización clandestina que lleva el nombre de doña Branca".

Archivado En